En Argentina, 7.364.147 personas recibieron al menos una dosis de una de las vacunas disponibles en el país contra el coronavirus, según se desprende del Monitor Público de Vacunación del Ministerio de Salud de la Nación. Es el 16% de la población. Pero solo 1.169.085 personas recibieron la segunda dosis, apenas el 3%.

El 72% de los que tienen una segunda aplicación, fueron inoculados con la Sputnik V. Según la base de datos abiertos publicada online por la cartera que conduce Carla Vizzotti, hasta ayer, sumaban 3.809.065 las personas que recibieron la primera dosis de la vacuna rusa. Pero a solo 839.189 le aplicaron la segunda.

La vacuna desarrollada en Rusia es diferente a las demás porque tiene dos componentes distintos, a diferencia del resto de los otros laboratorios. Esto implica que casi tres millones de residentes en nuestro país aguardan completar el esquema de vacunación con la fórmula rusa.

Sin embargo, solo quedan en stock 220.971 segundas dosis de la Sputnik V. Este número surge de cruzar los datos de las 1.060.160 segundas dosis arribadas al país, según el registro que lleva la Unidad de Datos de un portal de noticias a nivel nacional, con la información de las dosis ya aplicadas que aparecen en la base de datos del Ministerio de Salud de la Nación.

Ese stock alcanza, hoy, para vacunar contra el COVID-19 al 7% de las 2.969.876 personas que esperan completar el esquema con la Sputnik V.

El primer arribo del segundo componente de la Sputnik V fue el 16 de enero, cuando se recibieron 300.000 dosis. El 28 de ese mes llegaron 110.000 más. Recién tres semanas después, el 18 de febrero, arribaron otras 188.800 dosis a Ezeiza. Marzo fue el último mes de arribos: el 2 llegaron 211.360; el 26, otras 200.000, y el 30 de marzo, las últimas 50.000. Durante abril no llegaron segundas dosis de la vacuna rusa.

Aún no hay fecha estimada para la llegada de un próximo cargamento de la vacuna rusa a nuestro país, del total de casi 24 millones de dosis comprometidas que faltan arribar de los dos componentes. Hace dos semanas, la asesora presidencial Cecilia Nicolini reveló que Argentina volvió a ampliar su contrato con el Instituto Gamaleya de Moscú y, en lugar de 25 millones de dosis iniciales, el acuerdo es ahora por 30 millones en total. Alberto Fernández habló hace poco con su par Vladimir Putin que agilizar los envíos acordados, pero todavía no hay un cronograma oficializado de arribos de las dosis desde Rusia. La salida de los vuelos de Aerolíneas Argentinas se anuncian públicamente, a lo sumo, un día antes de su salida.

“Estamos trabajando con todas las vacunas para tener siempre la mayor cantidad posible lo antes posible”, señaló Juan Castelli, subsecretario de Estrategias Sanitarias del Ministerio de Salud de la Nación. “Se están solicitando vacunas de segundo componente”, agregó sin precisar una fecha.

El funcionario, responsable del Plan de Vacunación, explicó que hacia fines de marzo “se decidió priorizar la aplicación de primera dosis para todas las personas de la población objetivo”, basándose en “un diferimiento de intervalo mínimo de 90 días para los segundos esquemas”.

Explicó que “los esquemas de vacunación tienen intervalos mínimos”, por lo que “puede haber variación de días o una semana en la aplicación de la segunda dosis. No tiene que ser un día exacto”. Y advirtió que “con la primera dosis se genera una respuesta inmunitaria y disminuye la posibilidad de que la persona desarrolle la enfermedad. Con la segunda dosis, se prolonga en el tiempo esa respuesta de inmunización”.

Según esta estrategia de priorización de la primera dosis, el funcionario informó que “solamente el 21% de la población tiene el esquema completo”, por encima de los datos que figuran online en el Monitor Público de Vacunación, y aseguró que “es la misma estrategia que usó el Reino Unido y Canadá, que también puso intervalo de cuatro meses”.

“Así como con la vacuna de AstraZeneca, que se vio en la práctica tenía mejores resultados con la inmunización si la segunda dosis se aplicaba a las 12 semanas, la estrategia con la Sputnik V de extender el plazo es igualmente válida”, aseveró Castelli.

Según un informe liderado por investigadores del CONICET y realizado bajo la coordinación del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, la vacuna rusa produce una respuesta inmune que llega al 94% con una sola dosis. Además, reveló que las personas previamente infectadas que recibieron solo una dosis, producen cinco veces más anticuerpos que quienes completaron el esquema de dos dosis sin antecedente de COVID-19.

La mayoría de los que tienen las dos dosis de Sputnik aplicadas corresponden al personal de salud, el primer grupo en el que se priorizó completar el esquema de vacunación, en una primera instancia del plan de inmunización, cuando solo había llegado la Sputnik V. En total, las dosis aplicadas al personal de salud, incluyendo las de AstraZeneca y las Sinopharm, fueron 2.051.755.

 

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