A seis meses del incio de la peor pandemia del siglo XXI, que se cobró ya casi medio millón de vidas en todo el mundo, investigadores en el Reino Unido aseguran haber encontrado el que por ahora es el primer tratamiento capaz de evitar muertes por covid-19: la dexametasona.

Los responsables del ensayo clínico Recovery, llevado a cabo en el Reino Unido entre más de 11.000 pacientes, han informado hoy de que este fármaco reduce la mortalidad entre los pacientes muy graves que necesitan respiración asistida y también entre aquellos que necesitan oxígeno. El medicamento no ha demostrado beneficios entre pacientes con un grado de la enfermedad más leve.

De acuerdo a los responsables del estudio, la dexametasona puede evitar una de cada ocho muertes entre los pacientes más graves y una vida de cada 25 entre aquellos que reciben oxígeno. Estos resultados son aún preliminares, pero los responsables del trabajo han dicho que los publicarán pronto en una revista científica debidamente revisada por expertos independientes.

En todos los ensayos clínicos hay un comité de expertos independiente que revisa los datos provisionales y se encarga de pararlo en caso de que se detecte que un fármaco tiene beneficios para que de inmediato este se empiece a dar a todos los pacientes. Esto es lo que sucedió el pasado 8 de junio durante el ensayo clínico Recovery, que está analizando varios tratamientos contra la covid entre más de 11.000 pacientes en 175 hospitales del Reino Unido.

La dexametasona es un fármaco conocido —descubierto en 1957— y barato. Es un corticosteroide con efectos antiinflamatorios y supresor de la respuesta inmune que se usa contra reacciones alérgicas fuertes y enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide. La Organización Mundial de la Salud lo considera un fármaco esencial para cualquier sistema de salud.

Esta pata del ensayo británico estudió a 2.104 infectados que fueron seleccionados aleatoriamente para recibir esta droga. Su progresión se comparó a la de 4.321 pacientes que recibieron los cuidados habituales contra la covid-19. La mortalidad entre los que necesitaban respiración asistida fue del 41%, mientras que los que necesitaban oxígeno registraban una tasa de mortalidad del 25%. Entre los pacientes que no necesitaron estas dos intervenciones la mortalidad fue del 13%. La dexametasona redujo un tercio la mortalidad en el primer tipo de infectados y un quinto en el segundo. En los pacientes menos graves no se observó ningún beneficio en especial.

“La dexametasona es la primera droga que mejora la supervivencia en covid-19”, dice Peter Horby, investigador de la Universidad de Oxford y uno de los coordinadores del ensayo. “La supervivencia es mayor entre los pacientes que requieren respiración asistida, así que este medicamento debería administrarse a todos los pacientes en este estado. La dexametasona es barata, disponible y se puede usar desde ya para salvar vidas en todo el mundo”, sostuvo el investigador.

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