Alexis Olivera se encontraba desaparecido desde hacía 17 días y en horas de la tarde del domingo todo terminó de la peor manera. Su cuerpo fue encontrado sin vida en el río Paraná.

El joven, de 28 años de edad, no había dejado rastros de su paradero. La única pista con la que contaban de manera efectiva los investigadores era su auto, que había quedado abandonado en el puente de Rosario-Victoria.

El cadáver de Olivera fue identificado por sus familiares. El joven fallecido había enviado un mensaje a su ex pareja y madre de su hijo como si fuese una despedida el pasado 7 de marzo.

Luego, apagó su celular, tomó su auto y se marchó, sin dar información alguna de lo que haría. Sus seres queridos fueron notificados por la mujer y comenzaron a buscarlo por aquellos lugares en los que consideraban que lo podrían encontrar.

Como no lograban encontrarlo ni saber nada de él, hicieron de inmediato la denuncia. Efectivos policiales fueron tras él, en un operativo por tierra que duró más de 48 horas. Si bien se apoyaron en las cámaras de seguridad y de tránsito, no lo encontraban.

El auto, el indicio para encontrar el cuerpo
Fue el 10 de marzo cuando dieron con su auto, que estaba estacionado en el puente Rosario – Victoria. Eso generó un giro en la investigación y la hipótesis principal pasó a ser que se habría suicidado.

La Prefectura Naval de Entre Ríos comenzó a buscarlo por el río durante varios días hasta que observaron un cadáver en el río Paraná, a la altura de la ciudad bonaerense de San Nicolás.

El cuerpo estaba en una morgue privada, porque el sector público no tenía lugar. Si bien estaba cerrado durante el fin de semana, los familiares lograron que abriera sus puertas y reconocieron que se trataba de Alexis.

Los primeros datos de la investigación arrojan que su cuerpo no tendría signos de violencia. Se aguarda el resultado de la autopsia para determinar el motivo de su muerte.

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