Francia lanzó el satélite militar Syracuse 4A, el primero de una serie de tres que tienen como objetivo lograr una comunicación rápida y segura entre todas las fuerzas armadas francesas desplegadas en el mundo. La misión está dotada con mecanismos capaces de resistir eventuales agresiones desde la Tierra o el espacio.

El satélite militar Syracuse 4A fue lanzado con éxito desde la base de Kurú en la Guayana francesa. La misión tiene como objetivo permitir que las fuerzas armadas de Francia en todo el mundo se comuniquen de forma rápida y segura.

Gracias a su equipo de última generación (antena anti-interferencia y procesador digital transparente a bordo), el dispositivo cuenta con suficiente protección para resistir a eventuales agresiones desde la Tierra o desde el espacio.

«Está diseñado para resistir la agresión militar desde la Tierra y en el espacio, así como interferencias», aseguró a la agencia de prensa AFP el portavoz de la fuerza aérea y espacial francesa, el coronel Stephane Spet.

El satélite militar fue enviado a través de un cohete Ariane 5, que también puso en órbita un segundo satélite, el SES-17, en este caso comercial y destinado a ofrecer servicios de telecomunicaciones en América, el Caribe y el océano Atlántico, según explicó la Agencia Espacial Europea en un comunicado.

La fase de lanzamiento se cumplió 38 minutos y 41 segundos después del despegue y se espera que ambos satélites estén en servicio durante al menos quince años.

Este es el primero de una serie de tres satélites militares enviados al espacio. Un segundo mecanismo será puesto en órbita en 2022 y está programado que el tercero esté listo para 2025, subrayó el Ministerio francés de Defensa.

«Una novedad para el Ejército francés e incluso Europa»

Desde 2019, París creó un comando de fuerza espacial por las preocupaciones de que países rivales estuvieran invirtiendo fuertemente en tecnología espacial, vista como una nueva frontera militar.

En marzo, Francia comenzó sus primeros ejercicios militares en el espacio para probar su capacidad de defender sus satélites, los que califica como «una novedad para el Ejército francés e incluso Europa».

Estos lanzamientos se producen después de que en 2018 el Gobierno francés acusara a Rusia de haber acercado su satélite de recopilación de inteligencia Olymp-K, también conocido como Louch, al satélite militar franco-italiano Athena-Fidus, una operación que la ministra de Defensa, Florence Parly, llamó «acto de espionaje».

El pasado marzo, el Palacio del Elíseo informó que se siguieron registrando incidentes similares desde entonces, pero no ha entregado más detalles.

Marc Finaud, experto en proliferación de armas en el Centro de Política de Seguridad de Ginebra, sostuvo que el satélite también estaba protegido contra pulsos electromagnéticos que resultarían en caso de una explosión nuclear. «Este es el escenario de advertencia final, si falla la disuasión», subrayó.

Está previsto que las inversiones en el programa espacial de Francia alcancen los 4.300 millones de euros, alrededor de 5.000 millones de dólares, durante el período presupuestario 2019-2025. Aunque la cifra parece alta, se trata de solo una fracción de la cantidad gastada por Estados Unidos o China./ AFP y EFE

Comparte esta noticia