La Policía tuvo una madrugada movida en Frías y puso fin a dos fiestas clandestinas, cuyos participantes ignoraron los protocolos sanitarios y organizaron encuentros no autorizados con música e ingesta de alcohol. Los uniformados demoraron a 13 personas, de las cuales dos fueron imputados por poner en riesgo la salud pública, secuestraron dos motovehículos equipos de música y varios envases de bebidas.

Según consta en el informe policial, personal del Departamento de Seguridad Ciudadana N°7 realizó constantes recorridos por los barrios y zona céntrica de la ciudad de La Amistad y llevó a cabo uno de los procedimientos, alrededor de las 2 de la mañana, en una vivienda ubicada en Carlos Monti y Santa Fe, donde se desarrollaba una fiesta clandestina.

Al legar al lugar, se pudo constatar la presencia de varias personas en el interior y al entrevistarse con el propietario de 28 años, este habría confiado que se encontraba junto a un grupo de amigos compartiendo algunas bebidas.

De inmediato los agentes del orden desalojaron la fiesta y les informaron a sus 8 participantes, cuyas edades oscilaban entre los 16 y los 27 años, de la infracción al artículo 205 del Código Penal Argentino en el marco de las medidas para prevenir los contagios de Covid-19, mientras que la justicia ordenó la imputación al propietario por haber puesto en riesgo la salud pública.

En un segundo procedimiento de similares características, llevado a cabo una hora después del descripto en una vivienda ubicada en Calle España Y Pasaje América, los uniformados desalojaron una fiesta clandestina.

En este caso, otras 5 personas fueron demoradas y el propietario del lugar, un muchacho de 26 años, fue imputado por la Justicia por no cumplir protocolos dispuestos en torno a la pandemia y participaban de un encuentro social en el que podía observarse a simple vista la ingesta de alcohol y el irrespeto por las medidas sanitarias.

En ambos procedimientos tuvo intervención la fiscal de turno Natalia Simoes quien ordenó se actúe en consecuencia y se realice la fehaciente identificación de los propietarios.