La Municipalidad de la Capital continuó con los controles sobre las medidas preventivas adoptadas para mitigar la propagación del coronavirus en la ciudad, especialmente sobre la concentración de personas.

Equipos de inspectores del municipio recorrieron la ciudad para supervisar el cumplimiento estricto de dejar una distancia mínima de 1,50 metros de distancia, tanto en la atención, como en las colas y salas de espera en todos los locales comerciales, bancarios, cajeros automáticos y organismos públicos.

También se trabajó sobre la actividad de los bares, confiterías y restoranes respecto de la disposición de mantener las condiciones extremas de higiene y la distancia mencionada entre los clientes.

Cabe recordar que en caso de incumplimiento de las disposiciones el municipio procederá a labrar las actas de infracción correspondientes y a clausurar preventivamente los lugares.

En forma paralela, la comuna también intervino sobre los locales ubicados en el pasaje Castro, en donde se organizó el ingreso de público en tandas de cuatro personas cada 10 minutos, asimismo se controló que haya la distancia establecida entre clientes y vendedores.