Brasil profundizó este miércoles su colapso en el sistema hospitalario con casi todos sus estados en situación de calamidad por falta de camas de terapia intensiva, mientras que el gobierno central de Jair Bolsonaro advirtió sobre la falta de vacunas en una carta de urgencia al gobierno de China para que le venda 30 millones de dosis de la fabricada por Sinopharm.

El colapso afecta principalmente a los estados del sur, los tres que limitan con las provincias de Misiones y Corrientes, Parana, Santa Catarina y Rio Grande do Sul, cuya población identificada con el bolsonarismo se negó a adherir masivamente a las cuarentenas pero ahora, con bloqueos de circulación, no puede detener los contagios y la suba en las internaciones.

San Pablo, el estado más afectado del país y el más poblado, con 46 millones de habitantes, tiene en 13 municipios del Gran San Pablo todo su sistema colapsado y en general una ocupación de UTI superior al 80% incluso con la cuarentena iniciada el pasado viernes.

«Hoy tendremos probablemente 2.000 muertos en un día. Necesitamos una coordinación nacional. Si el gobierno nacional no asume que lo haga el Congreso», pidió el exviceministro de Salud de Bolsonaro Joao Gabbardo, actual coordinador del comité de Covid-19 del gobernador paulista, Joao Doria.

Comparte esta noticia