El Tribunal Oral Federal (TOF) 4 condenó al empresario Lázaro Báez a 12 años de prisión por maniobras de lavado de dinero por 55 millones de dólares entre 2003 y 2015.

El Tribunal por mayoría condenó al titular de Austral Construcciones y a 12 años por «lavado de activos agravado» y a la «multa de ocho veces el monto de las operaciones».

El «arrepentido» Leonardo Fariña recibió cinco años de prisión. Los jueces Adriana Palliotti, Guillermo Costabel y María López Iñíguez también sentenciaron a 8 años al abogado del empresario Jorge Chueco y al contador Daniel Pérez Gadin, mientras que Fabián Rossi recibió 5 años de pena.

Sobre Leandro Báez recayó la condena de 5 años de prisión, por ser «partícipe necesario» del lavado de activos, mientras que Federico Elaskar recibió 4 años y 6 meses por «lavado agravado».

Por su parte, César Fernández recibió 5 años de prisión, Melina Báez 3 años, pero su cumplimiento será dejado en suspenso, y Luciana Báez deberá cumplir tareas en un patronato.

Lázaro Báez está con prisión domiciliaria desde septiembre pasado, cuando la Cámara Federal de Casación Penal ordenó darle ese beneficio.

Martín Báez, está detenido en la cárcel de Ezeiza desde febrero de 2019 por orden del Tribunal, ante una denuncia por un intento de trasferir cinco millones de dólares cuando estaba inhibido. El hecho ocurrió cuando ya había comenzado el juicio, que todavía era presencial, en la sede de los Tribunales Federales de Retiro.

El juicio comenzó en octubre de 2018 y en los primeros tramos del debate se preveía una duración de ocho meses, pero se sumaron inconvenientes que corrieron esos plazos hasta que, finalmente, la pandemia de coronavirus derivó en la suspensión de las audiencias desde el 20 de marzo último hasta junio pasado, cuando se reanudó de manera virtual.

Báez fue detenido en abril de 2016 por orden del juez federal Sebastián Casanello, que instruyó la causa.

En su última intervención durante el juicio, el 30 de diciembre pasado, el empresario aseguró ser víctima de una «persecución sistemática del poder político, la prensa y gran parte del Poder Judicial».

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