La Corte Suprema de Estados Unidos acordó el viernes revisar un fallo de un tribunal inferior que limitaba severamente los poderes del gobierno para eximir a las pequeñas refinerías de la ley de biocombustibles de la nación, reavivando una disputa de larga duración entre las industrias del petróleo y el maíz.

La decisión se produjo después de apelaciones de empresas refinadoras que argumentaron que la decisión del Tribunal del Décimo Circuito el año pasado las había privado indebidamente de un método para evitar dificultades financieras otorgado por el Congreso.

Según el Estándar de Combustibles Renovables, las refinerías deben mezclar miles de millones de galones de etanol a base de maíz y otros biocombustibles en su combustible o comprar créditos a los que sí lo hacen, una ley destinada a ayudar a los agricultores y reducir la dependencia del petróleo extranjero.

Pero las pequeñas instalaciones bajo tensión financiera también pueden solicitar exenciones de la obligación, y la administración Trump ha aumentado drásticamente el número de exenciones otorgadas a la industria, lo que enfurece a los productores de biocombustibles que afirman que las exenciones socavan la demanda de sus productos.

Después de un desafío de grupos de la industria de biocombustibles, el 10 ° Circuito dictaminó en enero pasado que la Agencia de Protección Ambiental de los EE. UU. Solo puede otorgar las llamadas Exenciones para pequeñas refinerías a las instalaciones que las han recibido continuamente cada año desde 2010. Esa decisión arrojó dudas sobre toda la exención. programa, ya que la mayoría de las refinerías que obtuvieron exenciones en los últimos años no las han obtenido continuamente.

“Estamos decepcionados con la decisión de la Corte Suprema de revisar el caso, pero continuaremos buscando enérgicamente una resolución del daño que las exenciones de pequeñas refinerías causan a la industria del biodiesel”, dijo Kurt Kovarik, portavoz de la Junta Nacional de Biodiesel.

La Fueling American Jobs Coalition, que aboga en nombre de las refinerías, aplaudió la decisión de la Corte Suprema y dijo que la revisión llega en un «momento urgente» para las refinerías golpeadas por la recesión económica.

Se espera que el tribunal escuche el caso en abril y un fallo podría demorar varios meses.

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