El nuevo presidente de Bolivia, Luis Arce, dirigió la economía del país andino durante más de una década bajo el gobierno de Evo Morales y es reconocido como el arquitecto del crecimiento en la década de 2000 que sacó a muchos bolivianos de la línea de la pobreza.
Como ministro de Economía, Arce impulsó la nacionalización de muchos sectores y llevó a Bolivia a una tasa de crecimiento promedio anual del 4.6%.
«Yo tengo mis ideas desde que tengo 14 años y empecé a leer a Carlos Marx. Desde ahí no dejé de tener la misma posición ideológica y no voy a cambiar», señaló Arce en una entrevista a una agencia de noticias internacional en octubre pasado.
De 57 años, Arce creció en un hogar de clase media de La Paz y es conocido por hablar pausado y mantener un perfil bajo. Estudió Economía en la Universidad Mayor de San Andrés, en Bolivia, y en la Universidad de Warwick en Inglaterra.
Arce prometió no recortar el gasto público en su mandato, aunque también reconoce que serán necesarias algunas medidas de austeridad.
El presidente electo sigue confiando en que el milagro boliviano no se terminó: «Creo que nuestro modelo le mostró al mundo que hay otra forma de hacer las cosas y hacerlas exitosas», sostuvo.
