El séxtuple campeón mundial, el español Marc Márquez (Honda), logró la séptima colocación del Gran Premio de Portugal en su regreso al MotoGP después de nueve meses y el francés Fabio Quartararo se impuso con su Yamaha en la competencia corrida en el circuito de Portimao, sede de la tercera fecha del Mundial.

Márquez, de 28 años, no participaba de una carrera desde la primera fecha de la temporada 2020, en julio, cuando se fracturó el brazo derecho en el circuito español de Jerez de la Frontera, lo que hizo que debiera someterse a tres operaciones en las que le colocaron 12 clavos.

Al completar la prueba, el catalán regresó a su box y rompió en llanto con el aplauso de todo el equipo Honda oficial en reconocimiento a su esfuerzo y superación. «Ha sido duro», reconoció.

Márquez logró ubicarse en el tercer puesto después de una gran salida pero con el correr de las vueltas resignó algunos lugares, más preocupado por no exigir en exceso a su brazo y cumplir con el objetivo de llegar a la meta.