05 de febrero, 2025
Mujer

El final de una relación viene acompañado de una montaña rusa de emociones. Te ves privada de la comodidad y la familiaridad que tenías con tu pareja. La persona con la que has compartido historias, chistes, momentos embarazosos o sentimientos ya no existe en la forma que deseas. Algunas relaciones terminan de forma amistosa, pero algunas terminan con toxicidad y odio.

Las relaciones tóxicas son muy perjudiciales, empezando por el abuso emocional que, en algunos casos, se extiende a abuso físico. La terminación de una relación tóxica te puede dejar destrozada pero tienes que unir esos pedazos. Éstas son algunas maneras para sentirte mejor después del final de una relación tóxica.

 

-Toma tiempo para llorar

El duelo por el fin de tu relación es un proceso de curación natural y necesario. Reprimir el dolor, inevitablemente, tendrá un efecto en tus relaciones futuras. Date un poco de tiempo para reflexionar sobre las cosas expresando dolor.

Puedes llorar, comer un kilo de tu helado favorito o hablar con tus amigos más cercanos. Si ayuda, grita la angustia que sientes por dentro. Mediante el duelo, te regalas ternura y el dolor disminuye lentamente. Esto inicia el proceso de curación.

 

-Disfruta tu compañía

Después de una ruptura, te sientes vacía y sola. Experimentas la soledad y te encuentres corriendo hacia el teléfono para escribirle a tu ex pareja. Toma un descanso de todas las redes sociales donde puedes encontrar a tu pareja, ten auto-control y disfruta de un poco de tiempo para ti.

 

-Aprende a perdonar

Llevar una relación a su fin es difícil y angustioso. El dolor, con el tiempo, se convierte en ira y molestia que amenazan con apoderarse de ti. En lugar de actuar siguiendo tus emociones, abraza la paz a tu alrededor.

Perdona a tu pareja por el dolor que te causó y, poco a poco, olvida las cosas que te recuerdan ese dolor. Al dejar ir, estás a medio camino en el proceso de curación y la ruptura no va a doler tanto. Participa en actividades para distraer la atención de una manera positiva.

 

-Consiéntete

Después de una ruptura, tendemos a descuidarnos ir y poner en peligro nuestro bienestar. El abatimiento y la angustia perjudican tu salud y tu mente. Haz algo para consentirte. Haz una cita en el spa o disfruta de las cosas que te hacen feliz. Sé la razón de la sonrisa en tu cara.

 

-Rodéate de gente positiva

Cuando el proceso de curación está en movimiento, es bueno rodearse de amigos y familiares para afrontar mejor la etapa. Planifica una cita para comer con tu familia o haz una noche de videojuegos con tus amigos. Tus seres queridos actúan como un sistema de apoyo y evitan que analices demasiado la ruptura. Ellos ayudan a concentrarte en los aspectos positivos y prestar atención a las cosas que realmente importan.

 

-Tómate el tiempo para descubrirte a ti misma de nuevo

A esta altura, es probable que estés en buena forma física, mental y emocional. Quizá ya asimilaste tu separación. Llámalo un nuevo comienzo, esta es tu oportunidad de explorar y probar cosas nuevas. Tal vez puedes comenzar una nueva rutina de ejercicios o visitar ese lugar que siempre has querido conocer.

 

Si todavía está en duelo, recuerda una cosa: "Todo va a estar bien al final. Si no está bien, no es el final".

 

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