La Marcha de los Bombos celebró su 23° edición, reafirmando los lazos entre música, territorio y memoria colectiva.
El sábado 19 de julio se celebró la XXIII Marcha de Los Bombos. Fiel representante de Santiago del Estero, un año más reencarnó la esencia y le dio vida a los valores que atraviesan nuestra cultura.
Desde temprano, miles de personas se congregaron en diferentes puntos de la ciudad, personificando la unión que característica a la gente de esta tierra. Marcharon al unísono guiadas por el ritmo ancestral y el latido profundo del suelo que resonaba en cada bombo.
La jornada, parte de los festejos por el 472° aniversario de la “Madre de Ciudades”, volvió a emocionar como cada año. Santiago del Estero recibió a miles visitantes de otras provincias y países que se sumaron a esta fiesta popular.
Todo comenzó con las tradicionales vigilias del viernes por la noche, y finalizó en el Parque Aguirre, donde se presentaron las warmis santiagueñas “Sinchi Warmi” con un homenaje a Las Mullieris, cumpliendo con la consigna de este año: homenajear a las mujeres santiagueñas.
Desde niños con bombos pequeños hasta ancianos que no faltan nunca, la marcha sigue uniendo generaciones bajo un mismo latido.