Muy temprano, quince minutos antes de las 8, llegó Javier Milei a la Casa Rosada. Esta vez sin lucir traje y corbata, con una campera de cuero negro y con borceguíes al tono, bajó del auto negro modelo 2009 en el que se mueve desde hace tiempo y que lo trasladó desde el hotel donde se aloja en Córdoba y Maipú. Fue a su despacho y recién a las 8.30, en el horario en que estaba previsto, se sentó a la larga mesa del salón Eva Perón para la segunda reunión de Gabinete de su gestión.

La mesa esta vez contó con muchos más participantes que en la anterior. Además de los nueve ministros, de la secretaria de la Presidencia, Karina Milei, la vicepresidenta Victoria Villarruel y el diputado y presidente de la Cámara Baja, Martín Menem, se sumaron Rodolfo Barra, quien es el elegido por el Presidente para la Procuraduría del Tesoro aunque su edad legalmente se lo impide; el ex presidente del Banco Central en el gobierno de Mauricio Macri, Federico Sturzenegger, el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, el economista Lucas Llach, el ya oficializado a través del Boletín Oficial como Secretario de Legal y Técnica, Dante Javier Herrera Bravo, el titular del Banco Central, Santiago Bausili, e integrantes del equipo de Comunicación. 

“La mesa hoy está completa”, contó una fuente de la Rosada para describir este segundo cónclave donde se volvieron a analizar los diferentes indicadores económicos, apenas un rato después de la conferencia que a primera hora había brindado el vocero presidencial, Manuel Adorni. Allí se había anunciado que el ministro de Economía, Luis Caputo, difundirá esta tarde en un mensaje grabado un “paquete de urgencia” para “evitar la catástrofe”. El lunes, en la foto de Gabinete, la mitad de las sillas estaban sin ocupar, luego de la reducción de ministerios de 18 a 9 que había dispuesto el primer mandatario en su primer DNU.

Llamó mucho la atención la presencia de Sturzenegger y de Llach, dos ex funcionarios de otras administraciones. Ambos son cercanos y aconsejan a Milei sobre diferentes aspectos económicos. Todavía no tienen cargo asignado pero se los menciona para sumarse en algún área del Palacio de Hacienda.

Los ministros habían llegado antes y después de Milei al lugar de la reunión de Salón. en salón Eva Perón. De hecho, más allá del mandatario, los primeros en llegar al cónclave fueron la vicepresidenta Victoria Villarruel; de Interior, Guillermo Francos; el jefe de Gabinete, Nicolás Posse; y los ministros de Economía, Luis Caputo; de Interior, Guillermo Francos; de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Diana Mondino; de Infraestructura, Guillermo Ferraro; de Seguridad, Patricia Bullrich; y de Defensa, Luis Petri; de Capital Humano, Sandra Pettovello; de Salud, Mario Russo y el de Justicia, Mariano Cúneo Libarona.

Caputo se retiró de Rosada cuando habían pasado 40 minutos del encuentro, enfocado en la redacción de los últimos detalles de las medidas que comunicará por la tarde. También a otros integrantes del Gabinete como a Cúneo Libarona, Pettovello y Francos se los vio salir y volver a entrar, para hablar por teléfono, para fumar o para atender a alguna visita como en el caso del responsable de Interior. 

El programa económico tendrá sus principales lineamientos luego del mensaje del ministro. La situación de las finanzas públicas y la reducción de gastos en la función pública, en cada comunicación, denotan que la gran preocupación del flamante gobierno está puesta en el achicamiento del Estado. La sentencia “no hay plata” que surgió en la transición tras ganar el balotaje se repite una y otra vez.

Todos guardaron silencio cuando finalizó el encuentro pasadas las 11 de la mañana. Diana Mondino, la flamante canciller, fue la única que se detuvo cuando había llegado para hablar con la prensa acreditada a la salida del Salón de los Bustos. “Tenemos que seguir trabajando, trabajando y trabajando, no hay otra”, expresó sobre estas primeras horas del gobierno de Milei. Atribuyó la grave coyuntura económica a que “en los últimos tres meses hubo una emisión demencial. Es un problema que vamos a tardar mucho tiempo en solucionar”.