Más de 2.000 trabajadores y trabajadoras del sector científico-técnico y universitario de todo el país manifestaron su repudio al «accionar persecutorio del poder judicial y mediático» y expresaron su «apoyo incondicional» a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la causa conocida como Vialidad.

«Ante la nueva embestida de la corporación judicial, desde la comunidad científica, tecnológica y universitaria queremos dar nuestro apoyo a Cristina Fernández de Kirchner», expresaron los científicos y universitarios en un comunicado de prensa.

El documento lleva la firma de más de 2.000 trabajadores y trabajadoras del sector científico-técnico y universitario de todo el país y manifiesta el «apoyo incondicional» de la comunidad y repudia «el accionar persecutorio del poder judicial y mediático» contra la expresidenta.

«Esta persecución busca frenar el camino que iniciaron Néstor y Cristina en busca de una Argentina soberana, autónoma e independiente», subrayaron, al tiempo que recordaron que «fue Cristina, como presidenta y como militante política, quien jerarquizó y valoró de forma inédita el aporte de la ciencia y la tecnología argentina en la construcción de un proyecto de país desarrollado que incluye al conjunto del pueblo argentino a partir de la redistribución de la riqueza».

«El pueblo argentino necesita un poder judicial que no esté degradado y subordinado a los intereses de los sectores económicos concentrados», expresaron.

Entre los firmantes del documento se destacan la socióloga Dora Barrancos (UBA/UNQ-Bs As), el exministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Roberto Salvarezza (Conicet-Buenos Aires); la investigadora Fernanda Beigel (Conicet-Universidad Nacional de Cuyo-Mendoza) y la politóloga Valeria Brusco (Facultad de Sociales-UNC-Córdoba).

También firman el filosofo Rocco Carbone (Conicet-CABA), el rector de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego Daniel Fernández (UNTdF-Tierra del Fuego, A. e I.A.S.), la Presidenta CEFyL-UBA Micaela Ibañez, la presidenta de CECEN-UBA Abril Marcolongo y del Conicet, Ana Franchi.

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