La Coordinadora de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros en Argentina regional Santiago del Estero, habló sobre la problemática del acceso a una casa digna. Los desafíos que enfrentan son muchos, y el anhelo uno solo, un techo dónde vivir en paz y libres.
Las personas LGBT enfrentan numerosos desafíos que impiden su inclusión. Ninguna más importante que otra, porqué el trasfondo es el mismo, poder vivir como cualquier otra persona, con derechos y obligaciones.
Desde la violencia socioeconómica, educativa, laboral o médica, los desafíos son muchos, profundos y amplios. Uno de los que se ha puesto en eje trabajar cuánto antes, es el acceso a una vivienda. No hay cifras exactas, ya que tampoco se puede contabilizar quienes poseen un trabajo en regla para tener ese disponible para poder adquirir un lugar dónde vivir. Así se suman las dificultades que atraviesan día a día, sumado siempre en algunas circunstancias, a la violencia emocional.
“Debe cambiar la cuestión de que solo accedan los que tiene recibo de sueldo, que tienen que estar casados o con hijos. Hay muchas cuestiones por rever y ajustar para la comunidad LGTB”, manifiesta Rubí, la delegada provincial de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (Attta), quién además es la primera mujer trans en recibirse de docente de Nivel Primario con orientación rural y es actualmente Licenciada en Gestión Educativa.
En charla con La Columna, profundizó la realidad que viven y las acciones que están por llevar a cabo para generar un mínimo cambio, y que no solamente la provincia de Neuquén sea en el país quién haya otorgado un espacio para vivienda a las personas pertenecientes a la comunidad LGBT.
¿Cómo es la situación actual de la comunidad respecto al acceso a la vivienda?
La situación actual de la comunidad LGBT y puntualmente trans respecto al acceso a la vivienda es una cuestión muy compleja, puntualmente aquí en Santiago del Estero, porqué justamente la población trans no cuenta con uno de los requisitos que plantea uno de los programas, que es el tema del terreno. Muchas compañeras no cuentan con terreno propio, por lo general lo toman a modo de decir yo sí tengo, mi familia me cede un espacio, pero no tiene terreno propio. Entonces una de las situaciones actuales es que las compañeras no cuentan con un espacio en donde se puede bajar tranquilamente los programas, ya sea provinciales o nacionales.
Santiago del Estero no está ajena a la realidad de las otras provincias, hay toda una cuestión con el acceso a la vivienda porque no hay una política destinada para la comunidad LGBT
¿Tienen registro de cuántas personas han solicitado o necesitan vivienda y les cuesta acceder a ella?
Desde la asociación ATTTA, (Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros en Argentina regional Santiago del Estero) dada a esa condición o ese requisito, no son muchas las viviendas que nosotros hemos solicitado. Si hemos gestionado una vivienda para una compañera que sí contaba con terreno en ese momento, pero desde ahí para acá no hemos gestionado nada porque como te digo, carecen de ese requisito fundamental que tiene que ver con el terreno. Por lo tanto, no articulamos con ningún programa para que puedan salir, o sea, la decisión política está, pero ese requisito es importante.
¿Esas personas que han tenido inconvenientes para ese acceso sufrieron algún tiempo de violencia?
En realidad, el colectivo LGBT ya tiene violencia sistémica, o sea violencia en todos los sistemas, y el que acceda a una vivienda digna también está dentro del sistema.} Entonces el que se haga un requisito tan tajante, además de los requisitos de formalidades cómo el recibo de sueldo y cosas que la comunidad LGBT carece, también incide en el alto porcentaje de personas que no cuentan con vivienda, ya que ni siquiera tienen recibo de sueldo, no tienen un por ejemplo para adquirir una vivienda del IPVU.
¿Qué se precisa con urgencia para que la situación cambie?
En principio, generar políticas y tratar de que cambie la realidad que los requisitos del registro de la vivienda. O que el IPVU contemple cuestiones que vayan acorde a la realidad de la comunidad LGBT. Debe cambiar la cuestión de que solo accedan los que tienen recibo de sueldo, que tienen que estar casados o con hijos. Hay muchas cuestiones por revisar y ajustar para la comunidad LGTB.
Respecto a otras provincias, ¿en qué se avanzó y retrocedió respecto al cumplimiento de sus derechos?
Santiago del Estero no está ajena a la realidad de las otras provincias, hay toda una cuestión con el acceso a la vivienda porque no hay una política destinada para la comunidad LGBT. Solamente hay un antecedente en la provincia de Neuquén, en donde a través del municipio y de la comunidad religiosa, el municipio ha cedido un espacio y se ha pudo gestionar unos 23 departamentos que eran para las personas trans adultas mayo res. Ese es el único antecedente que hay en cuanto a lo que tiene que ver con vivienda, la presencia del estado y en este caso, la presencia de la iglesia católica que ha sido la que ha intercedido para que puedan dar a estas personas trans. Después, la realidad de todas las provincias es la misma.
¿En qué están trabajando actualmente para este derecho a la vivienda, y demás?
Nosotras estamos pensando en presentar un proyecto, tanto en la Cámara de Diputados como en el Concejo Deliberante, para que en principio se ceda un espacio, sea en el municipio o en la provincia, dependiendo cual pueda salir más rápido. Unos terrenos en donde puedan compañeras trans tomar posición, y que cada terreno tenga por ejemplo el nombre de Fabiana Tolosa, y que empiecen los programas de la provincia a poder ejecutar las casitas. Estamos pensando en todos los detalles para que pueda salir este proyecto, porque la verdad es que hay muchas compañeras que necesitan, muchas compañeras que siguen viviendo en sus casas y tienen problemas con su familia, situaciones de hostigamiento, etcétera.