El escritor oriundo de El Mojón fue esta vez destacado por la Escuela N°770 “Dante Franzzini”, de dicha localidad santiagueña, dentro del marco del proyecto “Santiago…memoria de tradiciones”.
El docente y escritor Aníbal Costilla no para de recibir condecoraciones por su manera de plasmar sentimientos. En esta oportunidad, sucedió en su propio lugar de origen, El Mojón, en el departamento Pellegrini. Julio Lorca, Mario Singh, Demóstenes Risso Patrón y Elena Amengual
Las distinciones se dieron dentro del marco del proyecto “Santiago…memoria de tradiciones”, que realza el gran trabajo de mostrar la historia desde sus distintas perspectivas sobre las ciudades del llamado interior.
En el caso de Aníbal, que nació justamente en El Mojón en 1980, y tiene publicado libros de poesías como el Mojonerías (2008), Historia del Vacío (2009), El árbol de los pájaros secos (2011), Los días solitarios (Subsec. de Cultura de Santiago del Estero, 2016) y De este lado del río (Equinoxio, 2018), Memoria del canto (Camelot América, 2018), Colección 2 Poemas (Ed. Arroyo, 2018), Dejarse llevar (Niña Pez Ediciones, 2019), Esto parece eterno (Caleta Olivia, Rangún, 2019), entre otras tantas producciones.
Algunas de ellas, “Las semillas”, que obtuvo el primer lugar en el Concurso Anual de Poesía Inédita 2021 “Enrique Banchs” de la Fundación Argentina para la Poesía.
El reconocimiento no solo fue en palabra, en aquella oportunidad obtuvo mil dólares
“Las semillas es un libro muy querido por mí. En algún momento tuvo otro nombre y fue trabajado en una clínica literaria junto al gran poeta argentino Jotaele Andrade, lo que significó dotar al manuscrito de otros significados, desde una mirada crítica y estética más certera. Al final obtuve un texto original de gran significatividad que en un principio quizás no conseguía”, menciono en alguna oportunidad Aníbal sobre aquel libro.“Es una obra centrada en la existencia del hombre, sus experiencias vitales, sus luces y sombras en el camino que recorre desde su nacimiento hasta el final; el contacto con su entorno natural; su lucha contra los mandatos establecidos y su vocación de poeta.
Además, es un homenaje a la naturaleza, con alusiones a los recursos naturales cada vez más aniquilados por la mano despiadada de algunos seres humanos. Esa mirada poética acerca de la experiencia humana tiene cierto enfoque ecológico. Es un enfoque poético sobre el hombre en el contexto natural. Su modo de mirar, de captar el poder de la naturaleza, pero también su relación con quienes habitan y comparten un lugar; en este caso, esta región.
También se lo puede analizar desde esta mirada: el hombre dejó de ser protector para convertirse en destructor del medio natural. El libro también aborda cuestiones relacionadas a mi experiencia personal en el ámbito familiar. Mi primer contacto con la literatura y, sobre todo, con la poesía. El contacto con los hombres y mujeres de mi familia, las búsquedas personales de sus propios caminos, pero sin olvidar las propias raíces. Por otro lado, la contemplación del fin de la vida, la certeza de la finitud. Por eso, la necesidad de la siembra, cuidando que las semillas sean las adecuadas y esperar las lluvias.
El texto también plantea que el soplo maligno del tiempo va apagando, sitio a sitio, las luces de los lugares amados en los que alguna vez vivimos y fuimos felices”, sentenció el autor.
“Combi”
Por otra parte, “Combi”, propone un viaje de ida, tan infernal como cotidiano, pleno de incontables
alusiones intertextuales, sin paisajes y con el desafío imperioso de no roncar jamás, por
entre preguntas conocidas, pero acaso sin respuesta.
Así presenta el último ejemplar que publicó de noviembre pasado Aníbal Costilla, siendo
su primera obra maestra dentro del género novela.
La presentación del libro fue una actividad fue organizada por el equipo del proyecto de extensión “La poesía de Aníbal Costilla. Usos interpretativos y creativos de la producción literaria en Nueva Esperanza, Santiago del Estero (SEU-UNSE, convocatoria 2022)”.
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