¿Cuántas veces invade nuestro cuerpo una sensación de vacío que no sabemos exactamente de dónde viene? En muchas ocasiones, ese vacío puede ser provocado porque perdemos a alguien o tenemos que despedirnos de determinadas situaciones, lugares u objetos por los que sentimos afecto, pero ¿qué pasa con aquello que no logramos identificar con claridad? Te contamos las claves para ser feliz que tienes que tener en cuenta a la hora de hacer un cambio en tu vida.
A veces la tristeza puede aparecer sin una razón evidente. Especialistas aseguran que el tiempo lluvioso y los días de mucho frío pueden ayudar a estas sensaciones y no por ello responder a una patología como la depresión o la desmotivación, que provocan que la persona que la padece se vea hundida en un agujero negro sin salida.
Los expertos proponen cambios de hábitos que nos llevarán hacia un estilo de vida más saludable, que influirán directamente en nuestro estado de ánimo.
Lo fundamental es no desesperarse y que nos gane la ansiedad, ya que los cambios de hábitos son los más difíciles de lograr y, sobre todo, de mantenerlos en el tiempo. Siempre hay que mantenerse con motivación y los cambios se irán internalizando cada vez más. ¡Paciencia que todo llega!
Es importante tener en cuenta que la vida está llena de momentos y a veces pueden aparecer situaciones que no sean para nada agradables.
-Buscar el origen y hablar
Muchas veces estamos tristes y sabemos exactamente cuál fue el motivo que la provocó. Esto es muy bueno, ya que, si podemos identificarlo con claridad, podremos saber dónde buscar para encontrarle una solución y que deje de hacernos sentir mal.
-Conoce tus emociones
Una persona que conoce sus emociones, sabe exactamente de qué manera manejarse en un momento poco favorable. Claro que este es un ejercicio que no se logra de un día para el otro, pero al darles el valor que les corresponde, nos permitirá ser inteligentes emocionalmente.
-Orden en tu hogar
Sea cual sea nuestro estado ánimo, todos tendemos a acumular cosas que ya no usamos o que están rotas y sabemos que jamás arreglaremos. No olvides que todos somos energía y nos rodeamos constantemente de ella. Deshazte de las cosas que no te sirven y pon foco al presente. Eso te generará una sensación de bienestar con uno mismo.
-Descansa bien
El descanso y las emociones se retroalimentan. Si estás triste lo más probable es que no puedas descansar, o porque estás muy inactivo o porque no parás de pensar en eso que te tiene mal. Producto de eso, al día siguiente la falta de sueño afectará sobre tu estado de ánimo generando un estado anímico ¨bola de nieve¨.
-Comida saludable
Infinidad de estudios científicos y médicos llegaron a la conclusión de que los alimentos influyen en nuestro estado de ánimo, ya sea para mejorarlo o para empeorarlo, porque son capaces de modificar las sustancias químicas del cerebro encargadas de las emociones.
-Incorpora la actividad física a tu rutina
El deporte y la actividad física aportan beneficios en el estado de ánimo y mejora la autoestima. Lo ideal es seguir una rutina que sea constante y esto sin dudas mejorará tu capacidad para pensar con optimismo y enfrentarte a los problemas del día a día de una manera distinta.
-Poner humor a la vida
Tener sentido del humor nos ayuda a mantener alejados aquellos elementos que dañan nuestra felicidad. El sentido del humor no es algo nato, como se cree erróneamente muchas veces, pero si se puede entrenar.
-Cultiva tu autoestima
Si bien no todo pasa por lo estético, incorporando nuevos hábitos que hagan verte y sentirte mejor, sin dudas cuando te mires en el espejo vas a ver una persona que se gusta y se mima, y tu estado de ánimo mejorará.
-Acepta los momentos de tristeza
La tristeza no puede ni evitarse ni negarse, forma parte nuestra vida cotidiana. Lo importante es saber cómo llevarla y afrontarla de la manera más sana posible. Depende de vos superarla y buscar ayuda a un profesional de la salud cuando creas que te sobrepasa.
-Nunca pierdas de vista tus sueños
En la vida hay que establecer objetivos y metas, tanto en lo personal como en el laboral. Estas metas deben ser reales y alcanzables, sólo así podrás medirlas en el tiempo.
Cuando estés sin motivaciones, mira para atrás y fíjate los cambios que hiciste en el último tiempo. Eso te motivará aún más y te va a dar más ganas de seguir.
(Fuente: buenavibra.es, por Juli Derisi)