El domingo a la noche hubo 22 personas internadas en la guardia del hospital de Cipolletti por complicaciones respiratorias producto de la infección por coronavirus. Personal de ese centro médico informó que durante el fin de semana hasta se mantuvo a pacientes en ambulancias «porque no había dónde bajarlos».
«Incluso nos pasó con ambulancias del sector privado que llegaron al hospital porque no había más lugar en ningún lado«, dijeron al sitio rionegrino.
A partir del desastre vivido el fin de semana pasado se tomaron decisiones.
«Desarmamos los consultorios de cardiología y se dispusieron ocho camas -y monitores- para pacientes con Covid-19. Cardiología se traslada al hospital viejo, en Fernández Oro, o a los consultorios que están por calle Naciones Unidas», confirmó Hernández.
Lo crítico del caso de Cipolletti es, además, que las nuevas camas «de Covid-19» serán atendidas por los mismos dos médicos y un tercero de apoyo. A estas alturas, hasta el área de Pedriatría fue reconvertida en una sala de internación para Clínica Médica.
«Se están ocupando todas las bocas de oxígeno que tiene el hospital, en cualquier lugar. El paciente que no requiere oxígeno cede su lugar al que lo necesita. Los ‘no Covid’ se reagruparon en otros sectores, donde no se precisa asistencia respiratoria», reveló a LMC Patricia Colipe, la jefa de enfermería de la guardia del hospital de Cipolletti.