Mientras Chano Charpentier continúa internado pero esta semana podría obtener el alta, su tío declaró este lunes en el marco de la investigación y aseguró que su sobrino no estaba violento ni tenía un arma blanca al momento en que fue baleado por un policía en su vivienda de la localidad bonaerense de Exaltación de la Cruz.

Según las fuentes judiciales, Esteban Charpentier, tío del músico, brindó su versión de lo ocurrido ante el fiscal Martín Zocca, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Zárate Campana, y con la presencia de Fernando Soto, abogado del policía acusado, Facundo Nahuel Amendolara.

El letrado explicó a Télam que el testigo modificó su declaración inicial brindada el día del hecho ante la Policía Federal Argentina (PFA). «Dijo que su sobrino no estaba violento, que no persiguió a los policías sino que los increpó y que tenía en sus manos una caña que tomó de un cantero», indicó Soto, quien agregó que en esta ocasión el declarante se ubicó «adentro del predio, cuando la vez anterior dijo que estuvo en la puerta».

«Ningún otro testigo presencial lo ubicó adentro. Antes dijo que escuchó el disparo y ahora que lo vio», señaló el defensor, en relación a que en una primera declaración, incorporada a la causa, el tío aseguró que su sobrino «salió de la casa a los gritos» y «blandiendo en sus manos un objeto contundente (posiblemente un palo)».

En su relato, el testigo indicó que el cantante increpó a su madre, a dos médicos y a los policías presentes y, sobre el momento previo a que fuera baleado, dijo que persiguió a uno de los policías que «quedó aislado de los demás». Según indicó, en ese momento escuchó «lo que aparentemente fue un disparo de arma de fuego» y observó cómo su sobrino caía herido y era atendido rápidamente por los médicos.

Esteban Charpentier es el séptimo testigo a quien el fiscal Zocca le tomó declaración para intentar reconstruir lo sucedido la noche del 25 de julio último cuando Chano Charpentier fue baleado en el abdomen por Amendolara, quien está imputado del delito de «lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego y por haber sido cometidas por un funcionario policial».

El fiscal procura determinar mediante testimonios y demás diligencias si el policía disparó para defenderse de un ataque del músico con una cuchilla aserrada mientras estaba bajo un presunto brote psicótico o si se cometió un exceso.

Zocca también aguarda que Chano esté en condiciones de brindar su testimonio esta semana, para lo cual solicitó un informe psicofísico al Sanatorio Otamendi, donde el músico fue internado tras el disparo a raíz del cual debieron extirpar el bazo, un riñón y parte del páncreas.

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