07 de septiembre, 2025
Nota de Portada

En medio de las denuncias derivadas de la difusión de grabaciones, supuestamente realizadas por Karina Milei, el gobierno nacional denunció a Pablo Toviggino de integrar una banda dedicada al espionaje ilegal. La demanda se suma otras que ubican al tesorero de la AFA de nuevo en el ojo de la tormenta.

El 29 de agosto pasado, durante la transmisión del programa “Data Clave”, en el canal de streaming “Carnaval” -el mismo que había publicado los audios atribuidos a Diego Spagnuolo, el ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad-, el periodista Mauro Federico comunicó al aire que disponía de grabaciones correspondientes a conversaciones de la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, hermana del presidente Javier Milei. 
Durante la transmisión se afirmó que la producción del programa contaría con más de cincuenta minutos de audios atribuidos a la funcionaria. A partir de allí, el periodista y sus compañeros de panel comenzaron a referirse a la información que poseían, y adelantaron que planeaban difundirla de manera espaciada con el correr de los días. Luego, liberaron al aire a las primeras escuchas, que calificaron como “la puntita”, y reprodujeron dos audios.
La revelación de los audios tuvo un impacto inmediato en el arco político y en la opinión pública, sobre todo, teniendo en cuenta que faltan solo unos días para las próximas elecciones en Buenos Aires, el principal distrito electoral del país. Obviamente que el principal afectado por la difusión de los audios fue el gobierno mismo. Para evitar la difusión de las grabaciones que habrían sido realizadas en la Casa Rosada, Karina Milei presentó una demanda en el fuero Civil y Comercial Federal, a fin de evitar que salieran al aire nuevos audios.
Mientras que el Ministerio de Seguridad Nacional presentó una denuncia penal por presunto espionaje ilegal ante la Justicia Federal. Precisamente la demanda explica cómo se habrían urdido los hechos que culminaron en la difusión de los audios.

LA ACUSACIÓN
La denuncia presentada por la cartera que dirige Patricia Bullrich ubica a Toviggino como una de las personas vinculadas con “la producción, manipulación y difusión sistemática de grabaciones atribuidas a funcionarios y ex funcionarios del Poder Ejecutivo Nacional”. A la vez, indica que “el propósito de sus autores es influir ilegítimamente en la opinión pública, alarmar y desinformar a la población, desestabilizar los principales indicadores de la política económica y, de este modo, influenciar el proceso electoral  en las próximas elecciones legislativas”.  
Específicamente, con respecto al rol del tesorero del máximo organismo de fútbol, la demanda lo ubica como propietario de “Carnaval”, el canal de streaming, “su dueño es Pablo Toviggino, mano de derecha del Presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio Tapia, y opositor declarado del Gobierno Nacional y de las ideas de la Libertad que reivindican el Presidente de la Nación y la Secretaría General de la Presidencia”, afirma la demanda interpuesta penalmente.
La acusación señala que “proliferan versiones sobre el origen de las grabaciones, y sobre la génesis de la operación criminal que permitió obtenerlas y publicarlas”, que sería precisamente el canal del que Toviggino sería su propietario.
Asimismo, se solicita a la justicia que “deberán disponerse las diligencias probatorias conducentes para verificar la participación de Pablo Tovigginio, en la difusión programada de las grabaciones captadas de modo clandestino”. Es más, lo califica como “financista y propietario del canal “Carnaval”. Mientras que el diario Clarín indicó que “también en círculos políticos se lo vincula con el excandidato Sergio Massa”.
En ese mismo sentido, la demanda interpuesta por el abogado del Ministerio que dirige Patricia Bullrich, requirió también “allanamientos” en el domicilio de Pablo Toviggino y los otros acusados “a fin de secuestrar dispositivos electrónicos (computadoras, notebooks, teléfonos, discos externos, pendrives) y documentación vinculada a las maniobras descriptas, de las cuales pueda determinarse quiénes fueron los organizadores y partícipes de los delitos cometidos”.
También se solicitó que su patrimonio sea investigado por organismos como la Inspección General de Justicia (IGJ) y la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), entre otros.
“Si es verdad que Toviggino tiene que con la plataforma Carnaval, él lo niega, el escándalo podría ser parte del conflicto por la intención del Gobierno de convertir a los clubes en sociedades anónimas. Una venganza por la medida de Sturzenegger de haber subido la alícuota del pago de aportes jubilatorios por parte de las entidades deportivas, muchas de las cuales quedaron muy dañadas”, dijo el analista Carlos Pagni.

QUIEN ES TOVIGGINO



Cuando la denuncia fue conocida, los santiagueños se escandalizaron, sobre todo porque no terminan de entender cómo habría hecho Toviggino para convertirse en el dueño de un medio, cuando hace un poco más de una década atrás era un hombre que se solventaba con las ganancias de un pequeño kiosco.
Sin embargo, el rosarino Pablo Toviggino apareció como referente de fútbol santiagueño cuando se convirtió en vicepresidente del club Comercio, del barrio Huaico Hondo, una entidad deportiva tradicional, pero con escasa cantidad de socios. Como titular de ese equipo, rápidamente se convirtió en presidente de la Liga Santiagueña de Fútbol.
Fue escalando posiciones hasta que, en 2015, apareció como dirigente de la AFA, coronándose como presidente del Consejo Federal de Fútbol, una designación que llamó la atención de propios y extraños, pues Toviggino era un desconocido hasta ese momento. Al año siguiente se convirtió en uno de los cuatro miembros de la Comisión Normalizadora y también en el tesorero de la entidad madre del fútbol argentino.  (Ver nota adjunta)
El alto cargo que ocupa en la máxima entidad del fútbol lo puso en el ojo de la tormenta y muchas veces fue señalado como la mano que ayudó a los clubes santiagueños –Central Córdoba, Mitre, Güemes y Sarmiento- en sus distintas etapas de ascenso. Sin quitar méritos por lo que éstos hicieron deportivamente para ocupar el lugar el lugar que hoy ocupan, los supuestos “arreglos” a su favor son dichos reiterados e inocultables.

LA RESPUESTA DEL DIRIGENTE
Tras la denuncia de la Justicia, Pablo Toviggino utilizó su cuenta de X para defenderse, jactándose de un tuit de Manuel Adorni, vocero presidencial.
"Gracias Manuel por confirmar que los audios fueron grabados por Karina Milei en la Casa Rosada. No soy dueño de CARNAVAL ni tengo ningún audio, pero ahora que veo la reacción del gobierno, realmente quiero escucharlos !!!. Si pidieron una cautelar para que no se difundan, seguro deben ser más graves que promocionar criptomonedas o robarle a personas con discapacidad !!!", dijo el tesorero de AFA.
Luego apuntó contra Patricia Bullrich: "Y qué decir de la Ministra Macartista …siempre recuerdo que nuestro Libriano Presidente, en tiempos no tan lejanos, la acusaba de poner bombas en jardines de infantes. Quizás deberían pedir el allanamiento de su domicilio ante la posibilidad de encontrar allí algún artefacto explosivo. De mínima sería bueno que explique la contratación del laboratorio suizo por la policía federal a su cargo. En Fin…."

DENUNCIAS ACUMULADAS
La denuncia presentada por el Ministerio de Seguridad de la Nación en contra de Toviggino no es la única. En noviembre del año pasado, el diputado de CABA, Facundo Del Gaiso, lo denunció en el Juzgado Criminal y Correccional Federal 4 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la demanda fue remitida a la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 1. 
En esa oportunidad, el tesorero de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), junto con el árbitro Nicolás Jara y el director nacional de Arbitraje de la AFA, Federico Beligoy fueron acusados por supuestos hechos de estafas y defraudaciones, debido a la presunta manipulación de partidos.
Según lo explicaron en Clarín, las acusaciones se deben a “la supuesta manipulación de partidos en el fútbol de ascenso, que habrían estado marcados por arbitrajes sospechosos y presuntos pagos en criptomonedas”.
La presentación judicial señala que los hechos denunciados se pueden tipificar como estafa y otras defraudaciones, delitos establecidos en los Arts. 172, 173 y 174 del Código Penal.
Además de las denuncias específicas contra los responsables del arbitraje, el legislador declaró en Olé que su pretensión es también que “investiguen cuál es el rol de Toviggino, de su manejo del fútbol del interior y lo que pasa con Sarmiento de la Banda. Esto es un generador de violencia, un día va a haber un muerto”. 
"El accionar objeto de la presente denuncia resulta prima facie constitutivo de los delitos de estafas y otras defraudaciones por los cuales Nicolás Jara, Federico Beligoy y Pablo Toviggino deberán responder como autores penalmente responsables", se afirma en la presentación judicial.
De esta manera se sumaba una denuncia más en su contra, las que se agregan a las que hicieron el abogado Edgardo Taboada y el empresario periodístico Aldo Corbalán.

PRIMERA DENUNCIA
La denuncia del legislador porteño le hizo a Toviggino no es la única que carga sobre sus espaldas. La primera de ellas fue planteada por el abogado Edgardo Taboada. Tal es así que LA COLUMNA se hizo eco de ella y el 3 de junio de 2021 publicó, en su edición N° 1427, un extenso informe titulado “Dos pícaros con suerte”, donde se destacaba que el máximo representante local del fútbol nacional, Pablo Ariel Toviggino fue denunciado penalmente por asociación ilícita y estafa, entre otros delitos, por tratar de apropiarse ilegítimamente de varios inmuebles.
“Una banda de delincuentes formó una asociación ilícita y llevaron a cabo un cúmulo de hechos delictivos que atentaron reiteradamente contra la propiedad y la fe pública, conformaron una maniobra compleja en procuras de apropiarse ilegítimamente del inmueble denominado “Vinal Sestiana”, y de otros inmuebles en todo el territorio de la provincia”, aseguraba el letrado.
En esa oportunidad, el letrado denunció a una docena y media de personas, quienes habrían tenido determinada participación en los hechos; en algunos casos, sus nombres habrían sido utilizados para cometer delitos sin que ellos lo supieran. En otros, las personas acusadas son una pareja de escribanos, empleados del Registro de la Propiedad y, para sorpresa de muchos, se mencionaba a Toviggino como uno de los principales responsables de la organización ilícita.
El informe publicado constaba de innumerables pruebas aportadas por Taboada, quien, entre otras acusaciones, señaló que “Toviggino fue el organizador de las primeras fases de la ejecución de los fraudes y estafas, haciendo las veces de gestor inmobiliario, ubicando inmuebles, reclutando prestanombres, contactando a los escribanos para las falsificaciones de documentos y la inscripción en el Registro de la Propiedad Inmueble”.

ELIMINAR AL MENSAJERO
Aquella publicación provocó un profundo cimbronazo en la sociedad santiagueña, sobre todo entre todas las personas señaladas como parte de la supuesta organización delictiva. Cada uno de ellos hizo lo que debía hacer en el plano judicial, pero a nadie se le ocurrió acusar a LA COLUMNA por la difusión de la causa penal. Quedaba claro que esta revista no era responsable de las demandas planteadas ni mucho menos de las acusaciones vertidas por el abogado Taboada. Sin embargo, no fue así. Alguien entendió que había que eliminar al mensajero, en este caso la revista, y fue más allá.
Es así que dos semanas después de la publicación, exactamente el 16 de junio de 2021, Pablo Toviggino presentó una denuncia penal en el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para pedir que se investigue a Aldo César Corbalán, fundador y director de revista LA COLUMNA, publicación que ya tiene 32 años de vida.
Su intención era que se investigue a Corbalán para determinar si “en marzo de 2021 se comunicó telefónicamente -desde un abonado telefónico identificado como "número privado"- con Toviggino, mientras estaba en su domicilio, en CABA. En la oportunidad, luego de insultarlo, le habría manifestado: “Sos una mier…, un hijo de p… y te voy a hacer cagar en la revista”. 

DENUNCIA ARCHIVADA
De igual manera, en mayo de ese mismo año “en una fecha aún a determinar”, habría recibido otra llamada, cuando se encontraba en la sede de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), supuestamente realizada también por Corbalán desde un número privado. En esa oportunidad, “luego de insultarlo y referirle que él, supuestamente, había dejado de financiar su revista, lo amenazó manifestándole ‘vas a ver lo que te va a pasar. Ni tu mamá te va a saludar. Te voy a hacer mierda. Te voy a cagar la carrera. Te voy a matar’”.
Según la denuncia del dirigente de fútbol, las llamadas deberían ser tipificadas como supuestos delitos de “amenazas”.
Si bien tales llamadas se habrían realizado en marzo y mayo, la denuncia judicial fue realizada luego de la publicación del semanario. Ello se ajustaría a la frase metafórica “matar al mensajero”, que se refiere al acto de culpar a una persona que trae malas noticias en vez del autor de las mismas, en obvia alusión a las graves acusaciones que recibiera de parte de Taboada y que fueron denunciadas por esta editorial.
Sin embargo, los tribunales porteños decidieron que la denuncia sea “archivada por falta de pruebas”.
Con su demanda, Pablo Toviggino pretendía silenciar no solo a Aldo Corbalán sino a revista LA COLUMNA. Su pretensión habría sido acallar a esta publicación y evitar nuevos informes que los afecten, como aquél donde un abogado asegura que “es el jefe de una organización que roba campos”. Sin embargo, propósitos de censurar a esta revista fueron en vano, pues la justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires desechó sus pretensiones.

CALUMNIAS E INJURIAS
Una vez que la causa en su contra fue archivada por falta de pruebas, el 25 de noviembre de 2022, Aldo Corbalán decidió denunciar a Toviggino por “calumnias e injurias”, tanto la ofensa difamatoria como el ultraje directamente personal. 
La causa recayó en la vocal de Cámara, Dra. María Eugenia Carabajal, jueza que diera lugar a las primeras medidas procedimentales, como notificar a la parte denunciada y, en abril de 2023, requirió que comenzaran a delinearse los pasos para dar inicio a la audiencia de conciliación obligatoria. Con lo cual, la demanda comenzó a moverse en sede judicial.
Sin embargo, el 19 de diciembre del año pasado, a pocos de iniciarse la feria judicial, el juez Julio Carmelo Vidal, otro vocal de Cámara dictó una resolución inentendible: declaró la incompetencia de la causa.
Así es que el juez Vidal decidió que la demanda en contra del directivo de la AFA ordenó archivar la causa, aun cuando la jueza de origen no dijo nada al respecto y dictaminara las primeras medidas. Lo que significa que se asume como competente para actuar en el asunto. Ante la jubilación de la jueza Carabajal, ocurrida en noviembre pasado, fue Vidal quien pasó a timonear la causa.
Así fue que, en tiempo récord, decidió que los tribunales santiagueños no podían resolver al respecto, y la causa cayó por completo.

CONTRA LA LIBERTAD DE PRENSA
En aquella demanda en contra del dirigente de fútbol se enfatizó en el ataque a la libertad de prensa que sufrió no solo Corbalán sino LA COLUMNA.
Es por ello que se hizo hincapié en que “lo que se advierte por parte de Pablo Toviggino es una clara afectación de la libertad de prensa que, según Badeni, es entendida como sinónimo del ejercicio de la libertad de expresión a través de cualquier medio técnico de comunicación social pública”.
En este marco, “la libertad de prensa recibe un tratamiento jurídico preferencial, no para satisfacer una necesidad individual de quien la ejerce, sino para preservar el sistema político que permite la manifestación armónica de las libertades individuales”.
Es más, se destaca que “el ejercicio de la libertad de prensa, en su dimensión institucional o estratégica no es absoluto. Pero está impregnado de un valor jerárquico superior al asignado a los restantes derechos individuales o sociales, ejercidos en una dimensión no institucional, que puedan ser perturbados con motivo de su ejercicio, pues se relaciona con la tipificación que merece un sistema político democrático”.
En ese contexto, se expresa que “la denuncia fue una manera maquiavélica puesta en ejecución por Toviggino para amedrentarme en mi tarea periodística, y a su vez impidiendo y estorbando la libre circulación de mi multimedio (revista, radio y portal web)”.
Es por ello que la demanda de Corbalán señalaba que “Toviggino solo realizó esa denuncia para manchar mi buen nombre y honor con la intención de calumniarme, intimidarme y coartar la libertad de expresión de un medio de comunicación como la revista LA COLUMNA, la cual publicó una nota en base a denuncias penales que tiene el mencionado sujeto”.

LA JUEZA, EL JUEZ: DOS MIRADAS DIFERENTES
En este punto hay que tener en cuenta que la jueza María Eugenia Carabajal ordenó las primeras medidas en contra de Toviggino, luego de que Corbalán planteara la querella por calumnias e injurias. Entre ellas se destaca la de comunicar de la misma al dirigente de la AFA y también plantear la audiencia de conciliación obligatoria. 
Tales medidas implican que la magistrada se declaró competente en la causa, por lo que comenzó a actuar. Todo ello, sin necesidad de expresar taxativamente su competencia. 
Debe tenerse en cuenta que estos planteos le llevaron casi un año a la magistrada.
Por su parte, el juez Julio Carmelo Vidal la reemplazó a fines de noviembre y, en menos de 20 días, decidió “declarar la incompetencia en razón de territorio”, ordenando que la causa sea archivada.
O sea, se declaró incompetente en una causa que ya estaba en marcha.
Aquel fallo judicial en favor de Pablo Toviggino, sería considerado como un desconocimiento de las leyes y que su fundamentación no se condice con los preceptos del Derecho. Por lo que Corbalán recurrió la medida y aun espera una resolución de los tribunales superiores.

De esta manera se acumula una nueva denuncia en contra del tesorero de la Asociación del Fútbol Argentino. Una más para Pablo Toviggino, quien también es señalado por la sociedad santiagueña como un hombre acostumbrado a hacer ostentación de sus riquezas. Una muestra de ello serían las fastuosas fiestas de cumpleaños para los miembros de su familia, que incluyeron la presentación de grupos musicales que cobran su cachet en sumas millonarias y en dólares.
A estas alturas, el hombre fuerte de la AFA ya debería estar acostumbrado a lidiar con las demandas penales que golpean a su puerta. Por ahora disfruta de su suerte y pareciera esquivar todas las balas, pero nadie sabe qué ocurrirá con la nueva demanda interpuesta en su contra por el Ministerio de Seguridad de la Nación. 
La justicia tiene la palabra…

“De Santiago a la AFA”
Aunque haya nacido en Rosario en 1979, de Santiago del Estero es Pablo Toviggino, secretario ejecutivo de la AFA -y ahora tesorero-, siempre la mano derecha de Claudio Tapia, reelecto como presidente en una asamblea virtual hasta 2025. También de Santiago es Guillermo Raed, presidente de Mitre y vice tercero de la AFA como representante del Ascenso del Interior. Pero es a Toviggino al que le atribuyen un alto poder de decisiones. Juego propio más allá de Tapia. De perfil bajo, no le gusta que le saquen fotos. Tampoco es muy futbolero: dueño de campos y de un centro de equitación, su pasión son los caballos. 
Si Tapia era llamado “El Comandante” entre los dirigentes en su campaña hacia la AFA, Toviggino era “El Jinete”, ya que recorría las provincias en busca de votos como hombre fuerte del Consejo Federal, órgano que rige el fútbol del Interior: 223 ligas, 3500 clubes y un territorio que se extiende de Ushuaia a La Quiaca. Antes de las elecciones, Tapia había colocado a Toviggino como vicepresidente de Barracas Central para poder incluirlo en el futuro Comité. Le dio un cargo clave a su armador político: secretario ejecutivo, el único rentado de la AFA, su jefe de Gabinete. En 2015, Toviggino había sido denunciado por compra de voluntades en favor de Luis Segura. Fue el “38-38”. “Desconozco la denuncia -dijo Toviggino, quien además había sido uno de los cuatro integrantes del Comité de Regularización-. Hago fuerzas para no reírme”.
Una paradoja: el club de Toviggino en Santiago del Estero es el pequeño Comercio Central Unidos. Fue vice y, de ahí, saltó a la conducción de la Liga Santiagueña de Fútbol. “A ninguno le conviene que el presidente esté molesto. Espero que entiendan, porque se les puede volver en contra”, les marcó Toviggino a los dirigentes de la Primera Nacional después de que San Martín de Tucumán, líder en una de las zonas, presentara una demanda en el Tribunal de Disciplina de la AFA y en el internacional Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) por la reformulación del campeonato en plena temporada a partir del parate por la pandemia. 
Histórico dirigente de Nueva Chicago, Daniel Ferreiro era el vocero de Tapia. Fue el constructor desde Ascenso Unido, un grupo de clubes de la zona metropolitana de Buenos Aires, para la llegada de Tapia a la presidencia. Seis días antes de que se concretase, Ferreiro escribió en su cuenta de Twitter que era una “fija” el “ascenso de Güemes”, se preguntó si “seguirá jugando con 14” y apuntó, sin nombrarlo, a Toviggino: “No estoy en la AFA y me arrepiento de haber estado. Debimos haber apoyado a otro candidato. Votamos a un presidente para que nos gobierne, no a un secretario al que no votamos”. Ahora Ferreiro prefiere el silencio, aunque advierte: “Si algún día me llaman de un juzgado, voy. Estoy totalmente decepcionado. Está todo a la vista. Hoy la AFA es pseudobizarra. El día que tenga ganas de hablar soy un bestseller”.
En 2017, en el programa ADN, del canal C5N, Toviggino fue denunciado por usurpación de 1700 hectáreas en Santiago con fines delictivos: que sirvieran como pistas de aterrizaje de aviones en el ingreso de droga al país. El caso no prosperó en la justicia. Aquel año, Patricio Gorosito cumplió parte de su prisión domiciliaria en su campo de 3800 hectáreas en Suncho Corral, Santiago. Gorosito, fallecido en 2018, había sido condenado por ser uno de los cabecillas de una organización dedicada a la exportación de cocaína camuflada en cargamentos de carbón vegetal a Europa, en la causa “Carbón Blanco”. Gorosito, una especie de mánager y representante que aportaba futbolistas, coincidió con Raed en Mitre. Los había presentado Julio Grondona. “Antes de que asuma como presidente de Mitre -dice Raed-, Gorosito estaba en Central Córdoba de Santiago. Después, cuando asumí, en muy poco tiempo no había acuerdo con los jugadores que proponía. Nunca tuvo un cargo. No fue un vínculo formal con Mitre, ni fue dirigente. No tenía sospechas ni conocía en qué podía haber andado”.  Raed, financista del camino de Tapia a Viamonte 1366, es el accionista mayoritario de Produnoa SA, productora de la gaseosa Secco, marca que figura como publicidad en más de 81 clubes de las nueve categorías del fútbol argentino.
(Extraído del informe denominado “De Santiago a la Afa”, de Roberto Parrotino, publicado en el diario Tiempo Argentino el 24 de enero de 2021)

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