Salir de compras ya es una misión casi imposible para la mayoría de los bolsillos. Hace años que esta tendencia crece y cada nueva temporada nos encontramos frente a vidrieras con precios exorbitantes que no nos dejan de sorprender. Pero no te deprimas. Conseguir prendas accesibles todavía es posible. Sólo se necesita de un poco de ingenio para saber dónde, qué y cuándo comprar.
No sobrestimes la etiqueta
¿Quién dijo que sólo se puede estar a la moda con ropa de marcas reconocidas? Olvida las etiquetas y concéntrate en buscar prendas de buena calidad, sin importar quién te las esté vendiendo. De hecho, en muchos casos son los mismos talleres quienes distribuyen un mismo diseño tanto a locales de marca como a los menos conocidos. ¿La diferencia? Una simple etiqueta.
Lo barato sale caro
El hecho de buscar ofertas no quiere decir que tengas que comprar cosas de mala calidad. Es fundamental buscar no sólo buenos precios sino prendas que estén bien confeccionadas. Así estaremos comprando ropa y accesorios que nos duren y no tener que salir el mes siguiente a arreglarlo o comprar algo nuevo
Ofertas de inicio de temporada
Aunque todas queremos comprarnos las últimas tendencias, muchas veces, con sólo esperar unos meses, podemos encontrar eso mismo a mitad de precio. Aprovecha los ofertas de fin de temporada para comprar esas prendas que seguro se van a seguir usando el año próximo.
Pequeñas oportunidades
No pretendas salir un día de compras y volver con las manos llenas. Lo ideal es estar atentas y encontrar pequeñas oportunidades ocasionales. Así, poco a poco vas a poder renovar el placard a un precio más que accesible.
La pinta es lo de menos
No te bases en prejuicios. Quienes evitan entrar a lugares que creen que no están "a su altura" pueden estar perdiendo ofertas y prendas originales sin siquiera darse cuenta. No tengas miedo de meterte en ningún lado.
Compras en el exterior
Si tienes la suerte de tomarte vacaciones en el exterior, incluí un porcentaje dedicado a las compras. Claro que no hay que excederse, pero siempre es bueno aprovechar la diferencia de precios y ofertas reales que podemos encontrar afuera.
Ferias americanas
Las ferias americanas son una excelente opción. Aunque no seas de las que les guste usar ropa de otra persona, no tengas miedo de investigarlas: siempre puedes encontrar prendas sin uso u opciones prácticamente nuevas.
Recorridos diferentes
No te limites a los lugares más conocidos o que te queden cerca de tu casa. Hay zonas que ofrecen alternativas a precios más que accesibles. Sólo es cuestión de meterse, investigar y encontrar locales que vayan con tu gusto.
Comprar por comprar
¿Quién no compró algo de lo que después se arrepintió? Hablamos de esas prendas que solo nos llevamos porque están muy baratas o por ese fuerte deseo de que nos queden bien. No hagas compras de las que te vas a arrepentir.
Prendas clásicas
Cuando tu presupuesto es limitado, lo ideal es que optes por prendas básicas que se combinen con facilidad. Esto no quiere decir que tengas que limitarte al blanco, gris y negro. Pero sí que al momento de elegir un par de zapatos, te inclines por un par tradicional. Así, no tendrás que comprarte uno diferente para cada temporada.
Canastos de sorpresas
¿Quién no entró alguna vez a locales con canastos de ofertas? No les tengas miedo ni te rehúses a revisar. Tomate tu tiempo que siempre hay algo que vale la pena, y a muy bajo precio.
No a la ansiedad
Cuando nos encontramos con esa prenda que nos encanta, la queremos comprar en el instante, sin importar cuánto nos cueste. Este es un gran y muy común error. Evita obsesionarte con una prenda y busca alternativas más económicas que puedan satisfacer tu deseo por igual. Si no encuentras más opciones, siempre vas a poder volver por ella.
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