Santiago del Estero volvió a latir al ritmo del color, la música y la creación colectiva. La segunda edición de “ArteVivo”, reunió a destacados artistas y profundizó el espacio para aquellos que no cuentan con un lugar para mostrar su creatividad.
El evento, ideado por Naisha Chandni y Angie Agüero, tuvo lugar en Tinkuy Patio Cultural – Club Hípico, en el Parque Aguirre, y reunió a más de treinta artesanos, diseñadores y veinte artistas plásticos, además de bandas en vivo, grupos de danza, talleres y performances artísticas.
“ArteVivo es una cita fija cada mes, un punto de encuentro donde la creatividad florece y la comunidad se une”, expresó Naisha, una de las impulsoras de esta feria que combina arte, diseño y participación. La entrada libre y gratuita, posibilito que toda la comunidad disfrute de una jornada donde el arte se vivió en tiempo real.
Durante el día hubo música, danza, pintura en vivo, charlas, maquillaje artístico, talleres de ajedrez, costura y reciclado, además de desfiles y espacios de intervención. Naisha, junto a Angie, estuvieron a cargo de la customización de prendas y barras artísticas, un sello personal que las distingue en cada evento.
HUELLAS
El nombre de Naisha Chandni ya trasciende los límites de Santiago del Estero. Reconocida por su marca “Naisha, arte y diseño”, la artista y diseñadora ha participado en grandes escenarios nacionales, como el Mar del Plata Moda Show, donde sus prendas fueron aplaudidas junto a diseñadores de las diez provincias del Norte Grande. Su estilo combina tejidos naturales, teñidos artesanales y pinceladas manuales, que transforman cada prenda en una obra de arte vestible.
“Un vestido que lleva consigo el vaivén de la chacarera, la intensidad del bombo legüero y la paz del monte santiagueño”, describe la artista sobre sus creaciones. Su trabajo rescata el folclore y la identidad local, convirtiendo lo cotidiano en una expresión de arte. “A la gente le gusta que son estampas pintadas, pueden parecerse, pero ninguna es igual a otra”, afirmó Naisha, destacando la autenticidad y el valor artesanal de sus piezas.
El arte como puente social
Pero el universo de Naisha no se limita a la pasarela. En los últimos meses, la artista visual y tallerista ha llevado su creatividad a distintos puntos de la provincia. Junto al Ministerio de Salud, coordinó talleres de muralismo con jóvenes y adolescentes en Villa La Punta, donde los participantes crearon su propio mural a partir de charlas y reflexiones colectivas. Esta semana, Naisha prepara nuevas intervenciones en un jardín de infantes y en un centro de jubilados, reafirmando su compromiso con el arte comunitario.
Uno de sus proyectos más significativos fue el “Mural Participativo y Taller de Muralismo Comunitario” en el Centro Cultural Huahuitas, en el barrio Juramento. Allí, junto a vecinos y vecinas, lideró una experiencia artística que transformó las paredes del barrio en un espacio de identidad compartida. “Más allá de la intervención artística en sí, el proyecto propone un taller gratuito y abierto, donde se comparten conocimientos técnicos y herramientas creativas. Queremos que los participantes no solo colaboren en el mural, sino que incorporen saberes que les sirvan como forma de expresión o salida laboral”, señaló la artista.
FLORECER EN LAS PAREDES
El muralismo, como bien sostiene Naisha, no es solo pintar: es dejar una huella colectiva, un testimonio visual del presente. En Santiago del Estero, este movimiento artístico ha crecido en los últimos años, con expresiones que recuperan la historia, la memoria y la identidad local. Espacios como el Instituto Espacio de la Memoria o el Parque Oeste ya lo demostraron, y ahora el barrio Juramento se suma a esa red de muros que hablan con colores y formas.
Con proyectos como ArteVivo, Naisha amplía esa mirada: el arte no solo se observa, se comparte y se vive. En su trayectoria se entrecruzan la moda, la pintura y la acción social, dando lugar a una propuesta integral donde la belleza y la conciencia caminan juntas.
“Son semillas que vamos plantando, para que cada persona descubra que puede crear, transformar y sentirse parte”, resumió Naisha. Así, su trabajo —desde los desfiles de Mar del Plata hasta los murales de los barrios santiagueños— se convierte en una metáfora viva de lo que propone: un arte que integra, emociona y florece, como el espíritu que cada edición de ArteVivo busca encender.