Una familia destinó 12 hectáreas de su lote para crear una Reserva Natural. Ubicada 12 km de ciudad Capital y a 8 de La Banda, sobre Ruta Provincial Nº1, el espacio invita a disfrutar del monte nativo con actividades de ocio y culturales entre tantos barrios.
“Este lote lo tenemos hace cuatro generaciones, viene de mis bisabuelos. A contrapelo de lo que viene sucediendo en la ciudad, con los barrios cerrados, que siguen avanzando contra la naturaleza, nosotros hicimos un paréntesis y reservamos un espacio para ella”, comentó a LA COLUMNA Pablo Muratore, abogado devenido en emprendedor.
Dedicado a las causas campesinas, sabe de qué se trata el monte. Estos conocimientos valieron para que junto a su familia decidieron donar una gran parte de sus hectáreas a un emprendimiento muy singular, la “Reserva Natural Mayu Maman”.
Las reservas ecológicas o naturales datan del año antes de Cristo. Formalmente, la primera considerada de tal manera fue en 1836 en Prusia, luego otras de grandes magnitudes, en 1872 en Estados Unidos. Es un área semi protegida, de importancia para la vida silvestre, flora o fauna, o con rasgos geológicos, y con fines de conservación y de proveer oportunidades de investigación y de educación.
Esta es la idea que maneja Pablo y su familia, quienes durante la pandemia del 2020 dieron rienda suelta al asunto. Con asesoramiento de profesionales, en ecología y construcción de casas naturales, avanzan en este espacio que oficia como Reserva Natural.
Aun así, las 12 hectáreas cubiertas por monte nativo, con flora y fauna autóctona y el Río Dulce hacia un costado, hacen de este lugar sin dudas una opción para recorrer y disfrutar, con la serenidad, paz y belleza que brinda la naturaleza.
¿Cómo ha surgido este gran emprendimiento? Que lo solemos ver de manera oficial –si se quiere-, pero particularmente, pocas veces.
Compartimos desde que tenemos uso de razón este lugar. Lo que estamos haciendo ahora es compartir más allá de nuestras amistades. Ese contacto con la naturaleza para pasar un día distinto.
Siempre que se entra a un monte se piensa que todo es igual, pero al ingresar a la reserva se nota las diferente flora y fauna que existe, todo autóctono.
Mis padres viven aquí y yo todos los días vengo. Hace 40 y pico de años que la habitamos, es la cuarta generación a la que pertenece.
Nos conocen todos los vecinos. Nunca hemos tenidos un incidente con alguien que nos visitó. Todo lo que hay es natural. Hace más de diez años esto era un monte para pasar al río. La pandemia nos llevó a tener una mirada introspectiva y a tirarnos para adentro para pensar en el futuro.
¿Dónde queda específicamente?
Está 12 km de ciudad Capital y a 8 de La Banda, sito en finca "El Alamo" Santo Domingo, Dpto. Robles sobre Ruta Provincial Nº1. Desde la estación de servicio que está el empalme de Ruta N°34 hacia la reserva, hay justo esos diez kilómetros.
Nuestro fondo da con el Río Dulce, antes de llegar al río hay unas lagunas, especie de oasis, llenos de animales silvestres.
Hasta llegar al río, en dos kilómetros de recorrido, se ve diferente flora. Lugares donde la arboleda es alta o más achaparrada. No hemos tocado el monte. Solamente hicimos una mínima intervención, como, por ejemplo, el puente.
Alrededor nuestro, por el contrario, el paisaje es otro, con mucho desmonte. Quizás sea por una necesidad, hay mucho barrio que se están haciendo. Gente con mucha solvencia va avanzando con el cemento.
Entonces todos esos animales que son expulsados por ese desmonte, los estamos recibiendo en la reserva.
¿Qué se puede hacer en ella?
Por enero y febrero tenemos a visitantes espontáneos o programados.
Las actividades son solamente diurnas, si pueden venir a pernoctar, pero con programación. El horario es de 8 a 19 horas.
El que quiera venir solo a conocer, lo puede hacer ya que está muy cerca de Santiago. Puede hacer el recorrido a pie, en bici, moto o auto. Se le cobra una entrada como colaboración. Es un paseo sin permanencia, para ciclistas y senderistas. Acceso a los senderos para MTB y sin ocupación de espacios para picnic.
También tenemos otra alternativa para aquellos que ya traen su equipo de mate y hacen el camino al río 2km, 4 senderos para MTB o senderismo, uso lugar de picnic al fondo (no se hace fuego) puente a la isla, lagunas de pesca recreativa, playas del Río Dulce.
Y como tercera opción tenemos el uso del quincho con asadores, senderos, playa del Río, pesca recreativa en lagunas, pesca normal en Río. Todo equipado con freezer, asador, disco y horno. También puede venir a pasar el día sumado a las posibilidades anteriores con unas 10 a 12 personas.
Recomendamos que no se cocine, si alguien quiere traer comida lo puede hacer. No dejamos que se utilice el fuego, ya que las llamas y el humo ahuyenta a los animales. Esto no es un zoológico, pero hay muchos animales silvestres. Lo sabemos por la cantidad de huellas, rastros que dejan.
Lamentablemente se esconden de nosotros que somos los invasores. Ellos huyen más que atacan. Vemos guasunchas chanchos del monte.
También siempre disfrutarán del silencio, no se va a escuchar música a todo volumen. No es un camping. Preferimos el canto de los coyuyos o cigarras. Si existe la posibilidad de pernoctar, traer uno mismo la carpa y quedarse, para disfrutar la mañana. El amanecer aquí es fabuloso.
Lo que sí recomendamos es la utilización de zapatillas acordes al lugar donde están por caminar. Es un monte, no se camina con ojotas. También uso repelentes y sombrero.
¿Es netamente ocioso?
Tienen una impronta cultural, por nuestro lote paso un fragmento del Camino Real. Hay secuelas del camino. Con profesionales estudiosos del tema estamos aprendiendo las características de esas huellas, así las podamos compartir con los visitantes.
Hay hallazgos arqueológicos que trae el río, como restos de tinajas. O paleontológicos como el gliptodonte que también encontramos en el rio y lo tenemos para exhibir. Tenemos nuestra huerta orgánica también.
¿Hay un guía que coordine la actividad?
Sí, hay un guía.
Si acordamos una visita guiada, una persona se encarga de llevarlo a conocer el lugar. Por nuestra parte nos estamos preparando, con licenciados en Ecología, o profesionales sobre construcción natural para solventar dudas.
Hace poco se nos enseñó sobre el rancho, y la reivindicación de estas figuras arquitectónicas que son las viviendas más adecuadas para el campesino en vez de la especie de horno…horno microondas que se le proporciona ahora.
Todo esto tiene que ver con la faceta cultural de Mayu Maman.
¿Cuánta intervención de ustedes tiene la reserva?
Muy poca. Hicimos un puente, porque suele el río aumentar mucho su caudal y nos impedía llegar al cauce. Es un puente de 33 metros, elevado, y es motivo de la serie de Mayu Maman. Ese es uno de los pocos atractivos artificiales que tiene la reserva.