30 de marzo, 2025
Entrevistas

Diagnosticada aproximadamente hace unos 4 años, su vida se divide en los tratamientos que sigue a pie de la letra y el progreso de su hija. Una historia en primera persona.

Más de 50 millones de personas están diagnosticadas con trastorno bipolar. Y un reciente estudio, confirma que cuatro de cada cinco casos de bipolaridad tienen un origen genético. No obstante, esto no implica que los hijos de personas con el trastorno tengan un 80% de probabilidades de heredarlo. El 20% restante se debe a factores ambientales, entre ellos el entorno familiar y laboral, experiencias traumáticas en la infancia o hábitos como el consumo de drogas.

La investigación surge de la Red Internacional de Investigadores Consorcio de Psiquiatría Genómica, que ha publicado en la revista ‘Nature’ el estudio genético de gran magnitud sobre la bipolaridad. Analizando datos de 158.000 pacientes a nivel global. En él los científicos han identificado 298 regiones genéticas vinculadas a la enfermedad, cuadruplicando los hallazgos previos.

Este hallazgo podría allanar el camino hacia tratamientos personalizados y facilitar un diagnóstico más preciso. Uno de los principales desafíos para quienes padecen bipolaridad es la dificultad de obtener un diagnóstico temprano.

Santiago del Estero no es ajeno a este diagnóstico. Muchas personas son tratadas al respecto, cómo María -que diálogo gentilmente con LA COLUMNA-, que a sus 35 años le diagnosticaron Trastorno Bipolar Afectivo, y con ello toda su vida cambió.

De una vida activa, alegre, con proyectos a concretar y una familia recién constituida, a fármacos, tratamientos y nuevos contextos. De un día a otro, simplemente su vida se modificó por completo.

Su historia cuenta -entre otros detalles- que luego de la separación del padre de su hija y el diagnóstico efectivamente confirmado, estuvo mucho tiempo sin poder tener contacto directo justamente con su pequeña. Además, tuvieron que jubilarla, volver a vivir con su familia materna y restringir salidas y encuentros con la vida social.

Todo sucedió en plena pandemia, y ello agudizó aún más el diagnóstico. Luego de cinco años y varios tratamientos, hasta dar con el indicado que incluye varias acciones no solamente fármacos, su vida mejoró y es controlable. En primera persona cuenta en pocas palabras -porqué, aunque puede hablarlo aún es una carga emocional para con los demás -, cómo es su realidad con el trastorno con el cuál conviven más de 50 millones de personas en el mundo.

 

¿Cómo te encuentras actualmente?

Después de varios años de tratamiento me encuentro bastante bien, en un momento de equilibrio. Me diagnosticaron trastorno bipolar afectivo hace unos años.

 

¿Cuáles son los tratamientos que realizas y/o realizaste?

Realizó tratamiento psíquico y psicológico con un aproximado de controles de una vez al mes o cada 15/20 días dependiendo el estado en el que me encuentre el profesional. Actividad física obligatoria. También he realizado varios tratamientos alternativos.

 

¿Quiénes han sido los profesionales que te acompañaron?

Desde el principio fueron varios. Actualmente la Lic Bianchi y Lic Lutfi, y el Dr. Gomez Shulz

 

¿Qué otras alternativas médicas o no, realizas para contribuir en tu mejor calidad de vida?

En la actualidad necesito de actividad física fuerte y danzas, momentos de relajación, streching, yoga. evitar y alejarme de los conflictos. Alternativos como flores de Bach, coaching, etc.

 

¿Cómo es tu día a día?

Mi día a día es en gran parte tranquilo. Intento organizarme y ponerme metas a corto plazo.

 

¿Tu familia o entorno está presente?

Si, algunos de mis familiares me acompañan y también unos pocos amigos a los cuales le conté.

 

¿Qué esperas de la vida?

Mientras mantenga el tratamiento con mi enfermedad, puedo vivir una vida normal, siguiendo los consejos de los profesionales.

Siempre me ponían el ejemplo la comparación con la diabetes, para entender que es algo controlable, pero había que mantener un control para tener una mejor calidad de vida.

 

¿Sueños por cumplir?

Claro que sí. Como cualquier persona. Mi enfermedad no me condiciona para poder cumplir mis deseos

 

 

Datos y cifras 

El trastorno bipolar es una afección de salud mental caracterizada por fluctuaciones de un extremo al otro del estado de ánimo. Durante un episodio maníaco, la persona tiene un estado de ánimo muy alto y mucha vitalidad; se siente muy contenta, excitada e hiperactiva. También puede sentirse eufórica, cambiar bruscamente de estado de ánimo y exteriorizar mucho sus emociones (por ejemplo, puede reírse sin parar o sentirse más irritable, nerviosa e inquieta que lo normal).

·         El trastorno bipolar es una afección de salud mental que afecta al estado de ánimo, la energía, la actividad y la ideación de la persona y que se caracteriza por la aparición de episodios maníacos (o hipomaníacos) y depresivos.

·         Se calcula que afecta a 40 millones de personas.

·         Causa dificultades y una discapacidad importante en varios aspectos de la vida.

·         En muchas ocasiones, no se diagnostica ni se trata correctamente y las personas afectadas son discriminadas y estigmatizadas.

·         Hay varias opciones eficaces para ayudar a que las personas con trastorno bipolar se sientan bien, que combinan el tratamiento farmacológico y las intervenciones psicosociales. 

(Datos informados por la Organización Mundial de la Salud).

 

 

Compartir: