En la vuelta de Carlos Tevez a su casa, como rezaron varias pintadas y pasacalles, Rosario Central empató 0-0 con Boca en la Bombonera, por la fecha 14 de la Liga Profesional de Fútbol. Tras el duelo, el actual técnico del Canalla enfrentó los micrófonos y no dejó tema por tocar: su emotiva vuelta a Brandsen 805, cómo vivió el partido, el plantel rosarino y para qué está su equipo.

“Fue una sensación muy rara la verdad, totalmente diferente a todas las que pasé”, comentó en primera instancia Carlitos en diálogo con ESPN, para luego contar las emociones que lo interpelaron apenas pisó el verde césped de la Ribera: “Apenas entré a la cancha busqué el palco de mi papa, es una emoción que no puedo explicar con palabras”.

“No lo iba a gritar, obvio. Lo viví como una situación que está buenísima mirarla, por Servio que patea muy bien y Rossi que ataja muy bien.”, sostuvo sobre el penal que finalmente Gaspar Servio malogró, pero al instante destacó el motivo por el cuál decidió asumir en el gigante rosarino: “Me entusiasma ayudar a los chicos, a potenciarlo. Eso me da ganas de ser técnico y me hace muy feliz. Es lo que me motiva”

Luego, se deshizo en elogios para con Facundo Buonanotte, pero advirtió que “Buonanotte tiene que ser Buonanotte, tiene 17 años y juega muy bien. Él tiene que hacer su camino, con la cabeza bien puesta en disfrutar a Central. Si sigue así, le queda poco (en el fútbol argentino)”.

Por último, puso sobre la mesa los objetivos que tiene en mente con la Academia rosarina: “Nosotros estamos apuntando a la Copa para el año que viene. Armar la base y después hacer un equipo mío», y sumó: «Yo me corro del lado político, yo sólo hago mi trabajo y me voy a mi casa. Dirigir a Central te hace crecer muchísimo”.