Aunque aún en niveles muy elevados, la inflación desaceleró en mayo y se ubicó por debajo de las proyecciones del mercado. El dato del mes pasado (7,8%), fue producto en buena medida de una marcada moderación en la suba del rubro alimentos. Y la tendencia, según los primeros sondeos privados, parecería haberse mantenido en la primera quincena de junio. 

Así lo destacó, por ejemplo, el IPC GBA que mide la consultora Ecolatina, en el que señaló que durante la primera mitad del mes se “sostuvo la desaceleración verificada en la segunda quincena de mayo”. “El índice registró un crecimiento del 7,4% respecto a la primera quincena de mayo. La moderación responde principalmente a una menor dinámica de Alimentos y en Regulados”, explicaron desde la firma. 

Y detallaron: “Alimentos y bebidas crecieron 6,9%, marcando una desaceleración de 1,2 p.p. respecto al mismo período del mes anterior. El menor incremento del capítulo responde a una menor evolución de los productos de Consumo Masivo, que crecieron 6,9% luego del elevado registro de la primera quincena de mayo (+8,4%), en conjunto con una moderación en el crecimiento de Frutas (+2,8%) y de Carnes (+1,6%). Por su parte, los Regulados treparon 7,7%, mostrando una desaceleración respecto a la primera quincena de mayo (+12,7%)”.

En tanto, desde la firma destacaron que los capítulos que más crecieron fueron “Vivienda y servicios básicos” (+11,8%), impulsada por los aumentos en electricidad (+29,7%) y alquileres (+10,5%); “Educación” (+9%), traccionado por aumentos en colegios (tanto en PBA como en CABA) y en artículos de librería y libros; y en “Equipo y mantenimiento del hogar y Salud”, ambos rubros con un crecimiento de 8,1%.

En ese escenario, para el resto de junio desde la consultora prevén un comportamiento similar al visto en la primera quincena, “con un mes que cerraría apenas por encima del 7%”. “Más allá de la moderación respecto a los elevados registros de abril (8,4%) y mayo (7,8%), no prevemos que esta tendencia se sostenga el resto del año: el régimen inflacionario actual no sólo se consolida en pisos más elevados, sino que es inestable y carece de anclas, por lo cual las fluctuaciones son parte de la naturaleza del proceso”, explicaron. 

Por su parte, el relevamiento que realiza la consultora LCG también evidencia una desaceleración en el rubro Alimentos y bebidas frente a los meses previos. Por caso, desde la firma señalaron que en la segunda semana de junio se registró una variación del 0,7% semanal, acelerando 0,2 p.p. respecto a la semana previa. Sin embargo, se trató de un incremento menor al registrado, por ejemplo, en la segunda semana de mayo: había trepado 3,6% semanal.

“La inflación promedio mensual también desaceleró, ubicándose en 6,5%, 0,8 p.p. menos que la semana previa (punta contra punta la suba es de 5,2% mensual)”, explicaron desde LCG, y remarcaron: “Esta semana el porcentaje de productos fue del 20% y suma la tercera semana al hilo en un nivel sensiblemente por debajo del promedio de principios de año”.

Relevamientos 

En la misma línea, de acuerdo al relevamiento que realizó la consultora Libertad y Progreso, el IPC acumuló una suba de 5% en las primeras dos semanas de junio. “Con esta suba, la dinámica de precios muestra una desaceleración respecto a la lectura de las primeras dos semanas de mayo (7,5%), y se ubica en los niveles que se registraban en la primera mitad de abril”, detallaron.

“Según nuestras proyecciones para las próximas semanas, la inflación de junio se colocaría en torno al 7,3%, lo que sería el nivel mensual más bajo desde febrero de este año. Aunque no hay que olvidar que estacionalmente la suba de precios de junio es menor que los meses previos. Todo esto asumiendo que no habrá eventos disruptivos como la corrida contra el peso de la última semana de abril”, remarcaron.

Entre los factores que inciden en la moderación de la inflación para este mes, es que se “erosiona el efecto arrastre que dejó la última semana de abril, la desaceleración en la suba del tipo de cambio oficial, que coadyuva a la desaceleración en los precios del rubro de alimentos y bebidas (que en la segunda semana de junio tuvo subas similares a las de principios de año) y el menor impacto de regulados (recordemos que en mayo hubo actualizaciones en las tarifas que no se repiten con la misma intensidad en junio)”.

También se registró una moderación respecto a mayo en el relevamiento de precios que hace C&T para GBA en la primera quincena, “tanto porque no hubo aumento del gas como porque los alimentos están creciendo a menor ritmo debido a bajas en las verduras”. “Con esta evolución, la inflación del mes podría reducirse a cerca de 7%”, concluyeron.

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