Luego de la autopsia a Facundo Astudillo Castro realizada el pasado 25 de agosto, se dio a conocer el informe final. Allí, se confirmó que la muerte del joven se produjo por asfixia por sumersión. El estudio fue entregado a la jueza del caso en la sede  del Equipo Argentino de Antropología Forense.

El cuerpo del joven fue encontrado en la zona de cangrejales de Villarino. A 45 días de aquel momento, la jueza a cargo del caso, María Gabriela Marrón recibió el resultado final de la autopsia.

A partir de un informe, se confirmó que Facundo Astudillo Castro murió por “sumersión”. Hecho que provoca la “obstrucción de la vía aérea por el ingreso de líquidos durante el proceso de respiración bajo el agua, generando el ahogamiento (asfixia mecánica)”, detalla el comunicado firmado por 20 peritos.

En cuanto al tiempo entre la muerte y el hallazgo del cuerpo, se detalló que “sería no menor a 30 días”. Dicho dato surgió a partir de los análisis de la acción del ambiente sobre el cuerpo, como así también, de la entomología, es decir, micro fauna hallada en los restos.

A su vez, dichos factores también revelaron que no existe la posibilidad de que el cuerpo haya estado en otro lugar. Y es que la pérdida de piezas dentales o modificaciones en los restos óseos se produjeron por “acción de carnívoros” y “posteriores a la muerte”. Hecho que se suma al impacto medioambiental sobre el cuerpo.

Si bien el informe no menciona la acción de golpes o heridas de armas de fuego, se consideró que ocurrió “una muerte violenta, por no ser natural”. Además, el documento detalla que “el avanzado estado de esqueletización del cadáver limitó las posibilidades de conocer el modo de la muerte”.