Una adolescente de 14 años de Kazajistán murió cuando su teléfono celular le explotó cerca de la cabeza mientras estaba durmiendo.
El cadáver de Alua Asetkyzy Abzalbek fue encontrado sobre su cama durante la mañana del sábado 28 de septiembre. De acuerdo con lo que trascendió, la joven se acostó, puso a cargar el dispositivo móvil y lo colocó en la almohada mientras escuchaba música.
Sin sospechar lo que podría pasar, la chica se durmió con el aparato muy cerca de su cara. A las horas, el celular explotó.
De acuerdo con los reportes de oficiales de las autoridades de la localidad de Bastobe, la víctima presentaba heridas de gravedad. Las primeras pericias arrojaron que el celular estalló durante las primeras horas de la mañana, tras sobrecalentarse durante el proceso de carga.
