Independiente tenía un solo objetivo esta tarde ante Arsenal: ganar para llegar a la última fecha con chances de clasificar a la final de la Copa Maradona. Sin embargo, en uno de los partidos más destacados del torneo, el elenco del Viaducto se hizo fuerte en Avellaneda y se alzó con un triunfo por 4-3 que dejó sin esperanzas al local. El partido tuvo todos los condimentos: goles, polémicas y una incertidumbre respecto del resultado que se sostuvo hasta el último segundo.
Lucas Albertengo, de pasado en el Rojo, cumplió con la Ley del ex y marcó el 1-0 a los 15 minutos del primer tiempo luego de un error de Alexander Barboza en el fondo rival. Sin embargo, los de Lucas Pusineri llegaron al empate sobre los 32′, con un remate de media distancia de Lucas Romero que picó unos metros antes de la posición del arquero, rozó el palo y se metió.
Ya en la segunda parte, sobre los 14′, Jhonatan Candia decretó el 2-1 para el elenco del Viaducto con un cabezazo llovido dentro del área. El Rojo volvió a igualar el marcador con otro estupendo gol desde afuera del área: esta vez fue Jonathan Menéndez el que dispuso el 2-2 con un gran remate al ángulo.
El partido ingresó en su momento más tenso y Alan Franco se fue expulsado tras ver dos amarillas casi de manera simultánea en un cruce con el juez del partido. A pesar de quedar con diez hombres, Independiente se las arregló para empatar por tercera vez el partido. Alan Velasco se vengó de aquella jugada en la que no le cobraron un penal y dispuso el 3-3 que volvió a encender la ilusiones del elenco de Avellaneda.
La expulsión de Candia a cinco minutos del final le dio una vida más al Rojo, que tuvo su gran oportunidad para ganarlo sobre el cierre cuando el partido se jugaba sin ningún tipo de orden y el triunfo estaba para cualquiera. Pero, cuando el duelo se extinguía y ambos ya habían dilapidado un gran número de situaciones claras, Luna aprovechó un mal retroceso del local para jugar un ‘tiki tiki’ en el área con Facundo Pons y marcar el 4-3 definitivo.
